Nueva Jersey, 9 de septiembre.

Janay Palmer, la esposa golpeada y noqueada por el jugador de la NFL, Ray Rice, salió en defensa de su marido por las consecuencias de la difusión del video donde se observa el ataque de que fue objeto dentro de un elevador.

En su cuenta de Instagram, Palmer dijo que su matrimonio pasa por una pesadilla, pero no por la agresión de la que fue víctima, sino porque el equipo de los Cuervos, la liga y los patrocinadores le dieron la espalda a su marido.

Me levanté esta mañana como si hubiera tenido una pesadilla horrible, escribió Palmer. “Quitarle al hombre que amo algo en lo que ha trabajado tanto durante toda su vida sólo para ganar ratings es horrible. Si su intención fue herirnos, hacernos sentir solos, han tenido éxito en muchos niveles. Vamos a seguir creciendo y demostrando al mundo lo que es el amor verdadero”, apuntó.

”Sólo me mantengo por mi esposa y mi hijo, es lo único que puedo hacer ahora”, dijo Ray, quien sólo se pronunció sobre el asunto mediante un texto que envió a un periodista estadunidense.

El video en donde se ve cómo Rice le asesta un puñetazo a Palmer que la deja inconsciente fue grabado el 15 de febrero. Un mes después se casaron. El corredor de los Cuervos fue arrestado entonces por violencia doméstica y ofreció disculpas públicas, pero su esposa no levantó cargos.

Tras la masiva difusión del video, los Cuervos despidieron a Rice y la liga lo suspendió por tiempo indefinido. Originalmente la NFL suspendió al jugador dos juegos .

Las secuelas continuaron este martes: Nike rescindió su contrato con Rice y Electronic Arts, fabricante del videojuego Madden 15, el más famoso y de mayor tradición de futbol americano, anunció que borraría cualquier rastro suyo de la edición recién lanzada.

Los Cuervos de Baltimore anunciaron en Twitter que planean ofrecer un intercambio de camisetas con el número que usaba Rice.