San José, California, 2 de septiembre.

México empieza un nuevo ciclo en el que buscará alcanzar metas futbolísticas que no se lograron en el Mundial de 2014, señaló el volante Andrés Guardado.

“No podemos estar viviendo ni para bien ni para mal del pasado, ni decir ‘me fue bien ahí y me dará para lo que viene’: hay que dar vuelta a la página”, aseveró.

Consideró que será necesario tratar de mantener la buena inercia que se tuvo en la reciente Copa del Mundo, la buena imagen, y lo malo que pasó solamente tomarlo como experiencia y tratar de que eso cambie en el futuro. Todos tenemos claro lo que queremos desde ahora, empezar a mentalizarnos que podemos hacer una selección diferente.

Desea que esa buena imagen nos dé motivación para seguir trabajando igual, para estos partidos, pues es una buena oportunidad de seguir demostrando que vamos en ascenso.

Sin embargo, mencionó que hay muchos aspectos por mejorar para que el futbol nacional crezca como se pretende y el principal punto es que exista unión.

Hasta que todos vayamos hacia un mismo lado, como país, como futbol mexicano, creo que se verá un cambio radical, dijo.

También habló sobre las críticas a los que juegan en Europa, como ahora a Chicharito Hernández. En México somos muy criticones, muy malinchistas, como que queremos que no le vaya bien a la gente, no lo entiendo.

Agregó que ellos tratan de representar a su país dignamente, de hacer oídos sordos a todas las críticas y demostrar semana a semana que uno sigue vigente.

Guardado y el resto del equipo tricolor trabajó este martes con miras al duelo amistoso que sostendrá este sábado frente a Chile, en el inicio del ciclo rumbo al Mundial de Rusia 2018.

En tanto, el portero Moisés Muñoz señaló que si el técnico Miguel Herrera habla con él será por algo sobre su futuro y no por su exclusión del equipo que disputó el certamen brasileño.

Voy llegando hace algunas horas, es el primer entrenamiento y no he hablado con él. Realmente no sé qué pasará, no se qué vaya a hacer Miguel, no me queda ninguna duda que si me tiene que decir algo será por lo que viene, lo que pasó no tiene caso tocar el tema, dijo.

Descartó que haya existido un distanciamiento con el Piojo por esta situación, sobre todo porque él fue responsable en gran parte del título que logró el entrenador con el América ante Cruz Azul.

Siempre hubo respeto a la decisión profesional y el apoyo siempre fue incondicional. No hay nada más que hablar, estoy feliz de estar aquí y lo que pasó, pasó, estableció.