También afecta a extranjeros, señala
Jueves 28 de agosto de 2014, p. 13
Uno de los principales problemas que afrontan las familias extranjeras o mexicanas en su retorno al país es el acceso efectivo a la educación básica
para sus hijos.
Un estudio del Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi) documenta casos de menores que no han podido obtener su boleta de calificaciones o el certificado de primaria o secundaria, lo que repercute en la continuidad de su formación académica
.
Si no cuentan con acta de nacimiento con apostilla (certificación de que la firma y el sello fueron impuestos por un funcionario facultado para hacerlo) y traducida, la inscripción a la escuela es temporal y condicionada
. Por tanto, no pueden obtener los documentos oficiales que avalen sus estudios.
Durante el ciclo escolar 2013-2014 la Secretaría de Educación Pública (SEP) matriculó a 307 mil 125 menores de origen extranjero. De ellos, 289 mil 727 nacieron en Estados Unidos, es decir, 94 por ciento.
De Centroamérica y el Caribe se encontraban inscritos 5 mil 225 y 4 mil 870 de Sudamérica. El resto provenía de Canadá y de los otros cuatro continentes, señala el Imumi.
La familia López relató al grupo de investigación del Imumi las complicaciones para que sus cuatro hijos, nacidos en Illinois, estudien en México.
Mi hijo Gustavo no podrá obtener su certificado de primaria porque no tiene el acta apostillada. A mi hija Laura no le permitieron inscribirse al primer año de primaria y perdió un año de escuela
.
Los altos costos, la falta de información o las circunstancias que rodearon la llegada o el regreso
de los niños a México imposibilitan que las familias cubran ese requisito, por lo que se convierte en un obstáculo para formalizar su ingreso al sistema educativo.