Lunes 18 de agosto de 2014, p. 37
La secretaría ejecutiva del Mecanismo de Seguimiento y Evaluación del Programa de Derechos Humanos del Distrito Federal busca frenar la expulsión de jóvenes embarazadas de centros escolares, lo que significa un acto discriminatorio.
Itzel Checa, titular del área, explicó que con distintas organizaciones se elabora un diagnóstico para conocer cuántas jóvenes están en esta situación e impulsar una campaña de prevención y atención, con el fin de que continúen sus estudios.
El matrimonio o los quehaceres del hogar, derivados de un embarazo o la maternidad, son algunas de las situaciones familiares que les impiden continuar con sus estudios, lo cual ocurre en 11.7 de la población femenina, casi tres veces mayor respecto del sector masculino, con 4.2 por ciento, de acuerdo con el Diagnóstico de Derechos Humanos del Distrito Federal.
La maternidad infantil y adolescente, explicó, son uno de los principales factores de exclusión educativa de niñas y jóvenes, por lo que es necesario implementar políticas que respondan a estas necesidades, como impulsar campañas de educación sexual.
Así como programas de prevención más efectivas para disminuir el embarazo adolescente y la creación de un programa integral de guarderías y servicios de cuidado infantil para favorecer el acceso a la educación de las jóvenes y facilitar su permanencia en la escuela.