Faltaban 20 minutos para las nueve de la mañana, cuando Carolina se acercó al área del bioma tropical del bosque de Chapultepec, colocó el recipiente con alfalfa junto a la reja y metió la mano derecha entre los barrotes con la intención de acariciarle la cara a Jambi, un orangután macho, mientras le comentaba a su compañera que ya lo había hecho antes .

En fracción de segundos el animal le jaló la mano, se la acercó a su hocico y le mordió un dedo, entre gritos de la estudiante de veterinaria y del personal del zoológico de Chapultepec que trataba de persuadir al primate para que la soltara.

Una vez que Jambi la dejó libre, Carolina recibió los primeros auxilios por parte del personal y la brigada de Protección Civil del zoológico y de inmediato fue trasladada a la Cruz Roja de Polanco. Un par de horas después, fue llevada al Hospital General Siglo XXI para injertarle el dedo; sin embargo, esto no fue posible dado el mal estado en que se encontraba la falange.

Alrededor de las 14:15 horas fue dada de alta. Por su propio pie salió del nosocomio para reunirse con sus familiares que la esperaban en la sala.

Antes del mediodía, durante un acto en las instalaciones de la Comisión de Recursos Naturales, en Xochimilco, la secretaria de Medio Ambiente capitalina, Tanya Müller García comentó que hubo un incidente que no pasó a mayores, ya se le está atendiendo, y puntualizó que la joven veterinaria realiza su práctica de servicio social en el zoológico.

Amplió que a fin de cuentas son animales salvajes con los que tratamos, y siempre existen riesgos aunque sean menores.

Más tarde, la dirección general de Zoológicos y Vida Silvestre informó que Carolina Hernández Matías lleva a cabo su servicio social en el Zoológico de Chapultepec, es pasante de la Facultad de Medicina de Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.

La dependencia aseguró que la estudiante pasó por alto los protocolos de seguridad establecidos en el Zoológico de Chapultepec al meter la mano para acariciar o tocar directamente al ejemplar, y explicó que como los prestadores de servicio social reciben una capacitación directa de los coordinadores médicos y biólogos encargados de cada área.

Además, explicó que se firmar el reglamento interno del propio zoológico, que especifica las condiciones en que deben realizar sus actividades rutinarias sin poner en riesgo su salud e integridad física así como la de otros.