Sábado 2 de agosto de 2014, p. 29
Juchitán, Oax., 1º de agosto.
Hace seis años, el doctor José Luis Hernández Ruiz, oriundo de Juchitán, adoptó a una bebé portadora del virus de inmuno- deficiencia humana (vih); algunos amigos lo felicitaron y muchos más lo criticaron.
Al conocer el desgaste económico y la discriminación que viven cerca de 35 menores con la enfermedad, ha emprendido junto con Yarith Tannos, gestora social, el proyecto de instalar una estancia infantil para niños con vih-sida, en el istmo de Tehuantepec,
Planea que empiece a funcionar en octubre y ya presentó un avance al gobierno oaxaqueño. Señaló que ha detectado 30 menores con el padecimiento, pero estima que hay al menos 60 afectados. Comentó que la adopción de su hija ha sido una de las mayores bendiciones que ha tenido su familia.
Relató que la llegada de la menor ocurrió cuando unos amigos le avisaron que una joven quería dar en adopción a su hija. Él se lo comentó a otros amigos que no tenían hijos y decidieron adoptarla. Sin embargo, cuando se enteraron de que la niña estaba contagiada la regresaron y finalmente él y su esposa decidieron adoptarla.
Detalló que tienen tres hijos y desde que la menor llegó a su hogar, comenzó su tratamiento médico, la canalizaron al Hospital General de la Ciudad de México, donde desde hace seis años acude cada mes, es valorada por un pediatra, un sicólogo y un nutriólogo.
En este ir y venir con mi pequeña, observé que con otros padres de familia, tanto de Juchitán como de los poblados Álvaro Obregón y Santa Rosa, además de los municipios Xadani, Unión Hidalgo, Matías Romero y la región de Tuxtepec, más o menos unos 35 menores viajamos a la ciudad de México. Ante esa situación pensé en un sitio especial para ellos
, refirió.