El precio del gas licuado de petróleo (LP), utilizado en 80 por ciento de los hogares de México, acumula un aumento promedio de 34 pesos o 16.89 por ciento en los 20 meses que lleva el actual gobierno. Sin embargo, cifras oficiales indican que en 38 regiones fronterizas de 11 estados del norte y sur del país, el incremento del gas LP oscila entre los 50 y 60 pesos, o sea 22 a 29 por ciento más, debido a que a partir de este año la tasa de 11 por ciento que pagaban de impuesto al valor agregado (IVA) subió a 16 por ciento para homologarla con el resto del país, como parte de la reforma financiera. La Secretaría de Economía (SE) dio a conocer que el precio promedio a nivel nacional del gas LP durante agosto será de 11.90 pesos por kilo, antes del IVA. En diciembre de 2012, cuando empezó el sexenio de Peña Nieto, el energético costaba 10.18 pesos por kilo, lo que implica un aumento acumulado de 16.89 por ciento como promedio nacional. Pero tal cifra queda superada por mucho en por lo menos la cuarta parte de las 145 regiones en las que las autoridades dividen el país para fijar tarifas diferencias del gas LP.