En Santa Ana Chiautempan, Tlaxcala, su alcalde apuesta por la mejor tradición taurina
Piedras Negras en el cartel de feria
a notable confusión de derechas e izquierdas con respecto a la fiesta de los toros como expresión cultural y manifestación idiosincrásica de determinados pueblos se ha agudizado en los últimos años en los países latinoamericanos. Por ello emociona que algunos municipios de México mantengan una idea muy clara de lo que es apoyar y promover, contra viento y marea, esta tradición centenaria.
Antonio Mendoza Romero, presidente municipal de Santa Ana Chiautempan, Tlaxcala, quien como candidato del PRD ganó las recientes elecciones desbancando al PRI, nació hace 40 años en San Pedro Muñoztla. Hijo de un modesto albañil y de un ama de casa, Antonio es el típico caso del militante pensante y comprometido que por diferencias con la jerarquía del tricolor fue aprovechado por otro partido junto con centenares de seguidores.
Desde muy joven supo liderar y hacer alianzas juveniles en su localidad hasta llegar a asistente del síndico. Luego, colaboró en la CTM, posteriormente ganó por elección popular el cargo de Presidente de Comunidad y fue relecto. Organizó y presidió la Asociación Estatal de Síndicos Municipales. Recién ingresado al PRD ganó la diputación por el quinto Distrito Local y fue elegido coordinador de la fracción parlamentaria del PRD. Tenía 33 años. Nunca ha perdido una elección en su comunidad y actualmente trabaja en la elaboración de una imaginativa Ley de Migrantes.
“Los ancianos me apoyaron para recuperar la presidencia de mi comunidad luego de rivalidades añejas –refiere Antonio–. Desde chamaco empecé a desarrollar el arte de la indiferencia ante las provocaciones y aprendí a no atenerme, excepto a mí mismo. Soy sutil pero encaro a mis colaboradores si me traen argumentos en vez de resultados a partir de una responsabilidad compartida.”
“He tenido que romper intereses, inercias y actitudes, la mala costumbre de la gente de recibir sin actuar. Retiré a los ambulantes del centro, así como las bases del transporte público en toda la ciudad, dejando sólo ascensos y descensos. Con mucha oposición coloqué parquímetros en el centro, lo que se ha traducido en un mayor flujo vehicular y limpieza, y en más espacios y dinamismo en compradores y visitantes.
“Mi origen es de campo, de trabajo rudo, de cultivo tenaz, por lo que tengo elementos de identificación y de identidad con la fiesta brava. En cada corrida y en cada faena encuentro mucho de mi andar y de mi ser. Muchas decisiones que tienes que tomar son tan instantáneas y determinantes como en una faena. La vida es como una faena: no importa lo que hayas deseado o planeado si no asimilas el azar y resuelves en sus términos. No porque algo esperes va a suceder.
“La fiesta es una lección de vida, una metáfora de la existencia humana –apunta Antonio, también licenciado en Educación Física–. Ser es algo muy complicado e inevitablemente hay que arriesgarse. La esencia de Santa Ana Chiautempan incluye el gusto por la fiesta de los toros por su raíz campesina, no sólo hispánica ni mestiza. Es una tradición de cinco siglos. Mi apellido es Mendoza, pero vengo de cuidar borregos y esta confluencia de razas no se opone a la tauromaquia, sino que la enriquece e imprime un sello propio.
“Los asturianos han estado presentes desde siempre, son parte de Santa Ana, pero no ésta de Asturias. El riesgo de no querer pronunciarse la autoridad en favor de la corrida y su ritual es porque le hemos apostado a lo predecible, no al riesgo de reflejarnos en el azar y de expresar rasgos de identidad. Le apostamos a lo simple, no a lo que nos comprometa y refleje. La cultura ha perdido mucho como expresión de pueblos. Es la consecuencia de uniformarla.
“En una corrida encuentras desde lo vulgar hasta lo culto, desde lo accidental hasta lo esencial, pero autoridades y partidos se han desentendido de la esencia y el rigor en los toros y en muchas otras expresiones. Pretenden olvidar que la tauromaquia se sustenta en el toro, no en el torero o en éste pero a partir del toro. La pólvora de esta mezcla racial obliga a darle a nuestra bravura un símbolo como el toro bravo con edad y trapío.
“Hacía muchas décadas que la corrida tradicional no se daba con seis toros. Para este sábado 2 de agosto, a las 14 horas, el Patronato de Feria, con la asesoría taurina de Antonio Moreno, ofrece un cartel de gran atractivo: una preciosa corrida de Piedras Negras, la ganadería madre, el matador venezolano Leonardo Benítez, el tlaxcalteca triunfador Uriel Moreno El Zapata y el sentimiento único de Jerónimo, en una moderna plaza portátil para cuatro mil 200 espectadores llamada La Mexicana. Con la adrenalina y la rivalidad por delante, esperamos una corrida exitosa y que Santa Ana Chiautempan continúe siendo un referente nacional taurino”, concluye su sensible presidente municipal.