San Cristóbal de Las Casas, Chis., 24 de julio.

México dejará de percibir entre 400 mil y 500 mil millones de pesos al año con la aprobación de las leyes energéticas secundarias, lo que afectará el presupuesto público porque con esos recursos se financian obras públicas, sueldos de maestros y médicos y se impulsan programas sociales, aseguró Andrés Manuel López Obrador.

Ya tienen todo acordado. Van a terminar de aprobar las llamadas leyes secundarias para la reforma energética en la Cámara de Diputados, porque lo que quieren es entregar las ganancias del petróleo a particulares, sobre todo al extranjero, sostuvo este jueves en el municipio de Huehuetán, región del Soconusco –cercano a la frontera con Guatemala–, al iniciar una gira de cuatro días por Chiapas.

De acuerdo con el presidente del Consejo Nacional del Movimiento Regeneración Nacional (Morena, que recientemente obtuvo su registro como partido político), esta banda de malhechores, ya para acabar con todo, está reformando la Constitución, las leyes, ya que el petróleo es un negocio fabuloso, porque no es como cultivar la tierra, sino extraer lo que está en la naturaleza; es un negocio de cien mil millones de dólares al año.

Añadió que es gravísimo que se privatice el sector energético, porque México se quedará sin nada, pese a que se impulse la actividad agrícola, la ganadería y la industria, ya que el sector energético es básico; no tienen petróleo todos los países del mundo, sólo 20 de cerca de 200 lo tienen, y uno de esos es México.

Consideró que cuando Morena triunfe en elecciones se abolirán las llamadas reformas estructurales que impuso el priísta Enrique Peña Nieto: la laboral, la educativa, la fiscal y la energética.

Destacó que aun cuando nos quieren dejar en ruinas el país, lo podemos sacar adelante, sólo evitando que se vayan al caño de la corrupción 400 mil millones de pesos al año.

Ante cientos de personas, el tabasqueño mencionó una encuesta en la que Peña Nieto está reprobado. Tenía tiempo que no se veía una calificación tan baja para un presidente de la República, está en 4.7.

Aseguró que el gobierno federal “no ha podido aplicar del todo la reforma fiscal o hacendaria porque hay protestas –la protesta ayuda, todo lo que resiste apoya–, porque es injusto que aumenten los impuestos y se incrementan cada mes los precios de las gasolinas, de la luz y del gas. Es un agravio, una bofetada al pueblo”.

La reforma fiscal es como regresar a la época del dictador Antonio López de Santa Anna, con el cual se perdió la mitad del territorio de México y se tenía que pagar impuestos por las puertas y las ventanas que tenían las casas, y hasta por los perros que tenían los mexicanos.

En Escuintla, municipio de la costa, López Obrador pidió al gobernador Manuel Velasco Coello que reanude el programa de apoyo a adultos mayores.

Planteó que si la Secretaría de Desarrollo Social federal les da 575 pesos mensuales, el gobierno estatal les complete mil pesos, sin excluir a pensionados del Instituto Mexicano del Seguro Social ni del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, porque reciben una pensión raquítica y el apoyo tiene que ser universal.

Recordó que en 2006 “le pedí a (el entonces gobernador de Chiapas) Juan Sabines que se apoyara a los adultos mayores de la entidad y se estableció el programa, pero llegó El Güero (Velasco Coello) y lo quitó, por lo que voy a seguir demandando que se restablezca”. López Obrador visitará este viernes los municipios de Unión Juárez, Tuzantán y Villa Comaltitlán.