Kiev y Kuala Lumpur acusan a Moscú de destruir pruebas sobre la caída del aparato
Vocero de pro rusos afirma que trasladan decenas
de cuerpos a la ciudad de Lugansk
Domingo 20 de julio de 2014, p. 23
Gravobe, Ucrania, 19 de julio.
Equipos de rescate internacionales comenzaron sus labores para recuperar los restos de los 298 pasajeros que viajaban en el avión de Malaysia Airlines que fue derribado por un misil el jueves pasado en el este ucranio, bajo control de separatistas pro rusos. Mientras tanto, los gobiernos de Ucrania y Malasia acusaron a Rusia y a los rebeldes de destruir pruebas relacionadas con la caída del aparato para encubrir responsabilidades.
Dos días después de la catástrofe los restos humanos, esparcidos a lo largo de varios kilómetros, han comenzado a ennegrecerse e hincharse por el calor. Los equipos de rescate buscan varillas con pañuelos blancos que se plantaron el día anterior, las cuales indican la presencia de los cuerpos.
Las investigaciones continúan siendo dificultadas por las condiciones caóticas y las intimidaciones, manifestó la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE). Los separatistas niegan obstaculizar la pesquisa, pero dijeron que se quedarán en el lugar para garantizar una indagatoria objetiva
.
Los expertos de la OSCE son seguidos por hombres armados y, a veces, enmascarados, reportó el vocero del organismo, Michael Bociurkiw. El problema es que el lugar no está acordonado como es habitual. Cualquiera puede entrar y manipular las pruebas. A cierta distancia se oyen combates. Es intimidatorio viajar allí y oírlo
, apuntó.
Además, faltan interlocutores del lado de los rebeldes. No hay un jefe
, lamentó Bociurkiw. Esto también complica la búsqueda de las dos cajas negras. No está claro dónde se encuentran
, sostuvo.
El viceprimer ministro de Ucrania, Vladimir Groisman, denunció que sus expertos sólo pudieron permanecer 30 minutos en el lugar. Según el jefe de los servicios secretos ucranios, Valentin Nalivaitshenko, los separatistas establecieron una zona de seguridad
alrededor de los restos del avión. Hasta ahora se han recuperado 186 cadáveres, según los servicios de rescate de Kiev. La búsqueda del resto es complicada, ya que las partes del avión se encuentran esparcidas.
A Kiev arribaron 132 expertos procedentes de Malasia, quienes viajarán este domingo al lugar donde se estrelló el avión. También arribó a la capital ucrania el ministro de Relaciones Exteriores holandés, Frans Timmermans, junto con 15 expertos.
El gobierno holandés, cuyos ciudadanos componen más de la mitad de las víctimas, dijo estar furioso
por el trato a los cadáveres, y pidió la ayuda del presidente de Ucrania para traer a nuestra gente
a casa.
El secretario de Estado estadunidense, John Kerry, hizo hincapié en una llamada telefónica al canciller ruso, Sergei Lavrov, que los investigadores deben tener acceso total al sitio.
El presidente ruso, Vladimir Putin, llamó a los rebeldes a cooperar, e insistió en que una investigación ordenada por Naciones Unidas no debe hacer conclusiones apresuradas.
Separatistas admitieron el traslado de cadáveres. Decenas fueron llevadas a Donietsk en presencia de observadores de la OSCE
, afirmó el portavoz rebelde Serguei Kavtaradze. Por razones higiénicas era imposible dejarlos allí
, añadió. En Donietsk serán entregados a expertos extranjeros, aclaró.
Revés a insurgentes
Las fuerzas de Ucrania arrebataron a los separatistas el control de la parte sudeste de la ciudad de Lugansk, en el este del país, anunció la presidencia ucrania.
El ministro de Defensa anunció que los accesos al aeropuerto de Lugansk fueron desbloqueados
. Sin embargo, el cuartel de las milicias populares de Lugansk desmintió el presunto revés.
El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, y el secretario de Estado estadunidense, John Kerry, acordaron ayer, durante una conversación telefónica, utilizar su influencia para que se termine el conflicto en Ucrania.