El gobierno de México lamentó ayer profundamente el derribo del avión de la compañía Malaysia Airlines (vuelo MH-17), mientras sobrevolaba el espacio aéreo de Ucrania, y se sumó al llamado del Consejo de Seguridad de la ONU y del secretario general del organismo, Ban Ki-moon, para que se lleve a cabo una investigación internacional exhaustiva, transparente e independiente, y rindan cuentas los responsables de este terrible acto.

El vuelo MH-17 de la aerolínea comercial salió de Áms-terdam el jueves con destino a Kuala Lumpur y mientras sobrevolaba el espacio aéreo de Ucrania se presume que fue derribado por un misil, lo que causó la muerte de 298 personas de diversas nacionalidades.

Las autoridades mexicanas expresaron sus profundas condolencias a las familias de las víctimas, a los gobiernos y a los pueblos de sus países de origen. En particular externaron su pesar a la Organización Mundial de la Salud (OMS), a Onusida y a la Sociedad Internacional contra el Sida (IAS) por el lamentable fallecimiento de un grupo de expertos e investigadores del virus del VIH/Sida que viajaban en la aeronave para participar en la vigésima conferencia internacional sobre dicha enfermedad en Australia.

A través de un comunicado de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), el gobierno de México pidió que se lleve a cabo una investigación internacional exhaustiva, transparente e independiente, de conformidad con los lineamientos de la Organización de la Aviación Civil Internacional (OACI), que esclarezca los hechos y garantice la rendición de cuentas de quienes resulten responsables del hecho.

El gobierno de Ucrania y separatistas pro rusos se culpan mutuamente de la tragedia.

Se trasladaban en el avión 154 pasajeros holandeses, 27 australianos, 23 malasios, 11 indonesios, 6 británicos, 4 alemanes, 4 belgas, 3 filipinos y 1 canadiense, entre otros.