Hoylake. El estadunidense Tiger Woods completó la primera ronda del Abierto Británico con una tarjeta de 69 golpes, a tres del líder irlandés Rory McIlroy, y detrás del italiano Matteo Manassero, para demostrar que está en la pelea del tercer Major de la temporada, a sólo tres meses de haberse sometido a una operación de espalda. El inicio no fue promisorio para el estadunidense en su regreso al club Royal Liverpool, en Hoylake, donde terminó la vuelta en octava posición. Con dos bogeys en los dos primeros hoyos se esperaba una vuelta floja del ex número uno del mundo. Sin embargo, fue rencontrando su juego y entre el hoyo 11 y el 16 logró cinco birdies.