Civiles, la mayoría de las víctimas; Karzai condena el ataque
Miércoles 16 de julio de 2014, p. 28
Kabul, 15 de julio.
Al menos 89 muertos y más de 40 lesionados dejó hoy un atentado suicida con coche bomba en la provincia de Paktika, sur de Afganistán, en uno de los ataques más violentos en el país en lo que va del año, el cual ocurre a la mitad del mes sagrado del Ramadán.
Un hombre hizo estallar la mañana de este martes un coche bomba cerca de una mezquita en un bazar del distrito de Urgun.
El gobernador Mohammad Reza Kharoti reportó que la mayoría de las víctimas fueron civiles, aunque también hay al menos dos policías muertos. Medios locales señalaron que entre los fallecidos hay muchas mujeres y niños.
Kharoti añadió que el hospital estatal está superado por la cantidad de heridos. La explosión sacudió todos los alrededores y causó graves daños en el bazar. La zona está llena de sangre
, enfatizó.
La explosión fue tan poderosa que sacudió todo el área. Cientos de tiendas y otros negocios resultaron dañados
, explicó Kharoti.
Paktica comparte frontera con las regiones tribales paquistaníes. El ejército de Pakistán lanzó allí una operación contra los escondites talibanes.
Sin embargo, los talibanes negaron ser los responsables. Condenamos el hecho
, señalaron en un comunicado, en el cual aseguraron que sus combatientes protegen a la población civil, algo que contradicen las estadísticas de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Un subjefe de la policía local, Nissar Ahmad Abdulrahimzai, declaró que la corporación fue alertada del vehículo y que era perseguido cuando estalló.
El atentado es uno de los más mortíferos en meses recientes. En octubre de 2012, durante la fiesta musulmana del sacrificio, Aid al Adha, un atentado suicida dejó al menos 42 fallecimientos en una mezquita del norte de Afganistán.
En Kabul, la capital afgana, una bomba a control remoto escondida al costado de una calle provocó la muerte de dos empleados de la oficina de prensa del presidente Hamid Karzai y dejó cinco heridos, informó la policía. Los talibanes se adjudicaron la responsabilidad.
Los ataques ocurren mientras los soldados extranjeros se retiran gradualmente del país.
Karzai condenó los atentados, ya que van contra los valores religiosos y humanos y no pueden justificarse por ningún medio. Atacar civiles inocentes en el mes sagrado del Ramadán es un acto imperdonable y derramar sangre musulmana es un gran crimen
, puntualizó en un comunicado.
Según Naciones Unidas, el número de civiles muertos o heridos en combates o atentados entre el pasado primero de enero y el 30 de junio se incrementó 24 por ciento respecto del mismo periodo en 2013.
Durante este lapso, mil 564 civiles perdieron la vida en el conflicto afgano, de acuerdo con los datos de la ONU.