La ruptura de uno de los hilos conductores de energía eléctrica de la línea A del Metro provocó que se suspendiera el servicio por cerca de ocho horas en las estaciones Peñón Viejo y Acatitla, seis trenes quedaran varados y los usuarios fueran desalojados por las vías.

A las 8:32 horas se reportó la falla eléctrica al puesto de control central, por lo que personal de seguridad institucional, protección civil y seguridad industrial e higiene del Sistema de Transporte Colectivo (STC) solicitó bajar el switch y sacar a la gente de los carros.

Dicha labor tardó alrededor de 15 minutos en el primero de los trenes y luego fue consecutiva en los cinco restantes, de acuerdo con información del organismo, aunque usuarios señalaron, por medio de las redes sociales, que permanecieron más de una hora dentro de los vagones en espera de ayuda, y los usuarios más de 45 minutos en los andenes, sin que nadie les informara qué sucedía.

@atrejocruz escribió: estuvimos una hora sin servicio de seguridad hasta que ya estábamos en las vías. Eso sí tiene plan. No fue una falla de energía, se le rompió la toma de energía que lleva en el techo y ese mantenimiento?

Decenas de usuarios salieron de dichas estaciones en busca de otro medio de transporte, pues los 50 autobuses de la Red de Transporte de Pasajeros dispuestos para trasladar a los usuarios de manera gratuita a las estaciones Santa Martha y Guelatao, habilitadas como terminales provisionales, resultaron insuficientes.

Policías con camionetas pick up, granaderos en camiones y los llamados costeros apoyaron también el traslado, pero sin éxito, lo que generó graves problemas de tránsito en la calzada Ignacio Zaragoza, al invadir la gente hasta dos carriles de circulación para subirse a algún microbús o taxi.

El servicio se mantuvo provisionalmente en los tramos de Pantitlán a Guelatao y de La Paz a Santa Martha hasta las 16 horas, cuando fue reparado el sistema de energización de los trenes y se verificaron las condiciones máximas de seguridad de operación en la referida ruta.

Trabajadores de las áreas de transportación, material rodante, instalaciones fijas y mecánicas y baja y alta tensión señalaron que, además del hilo conductor dañado, uno de los trenes resultó con los fusibles fundidos y fue necesario revisar también su pantógrafo (aparato que lo une con la catenaria) con el fin de obtener la energía eléctrica para la tracción y circular, así como en otros dos trenes.