Al tema de los menores migrantes no acompañados se le ha dado una respuesta integral en plena coordinación con todos los países involucrados, imponiendo siempre la preocupación humanitaria de atención al niño, aseguró el canciller José Antonio Meade Kuribreña al ser interrogado sobre el hecho de que el tema migratorio vuelva a ocupar los primeros planos en la relación con Estados Unidos, luego de que la actual administración ha procurado colocar a la cooperación económica y la educación como los ejes visibles, por encina de migración e inseguridad.

Creo que lo que se ha puesto de relieve es la disposición de México de trabajar de la mano con los demás países para asegurar que al fenómeno migratorio se dé la atención debida, respondió, tras señalar que México ha planteado una política pública que va desde ordenar los flujos migratorios y fortalecer la infraestructura física, hasta reforzar la humanitaria reflejada en albergues, en espacios de atención de salud, en un compromiso renovado de coordinación y esfuerzo regional de combatir el fenómeno de trata y de compartir experiencias consulares con los países de Centroamérica en Estados Unidos y reforzar su presencia consular en México.

–¿Qué responde el gobierno a la Organización deNaciones Unidas (ONU), que plantea a México y a Estados Unidos que deben otorgar asilo a estos niños nuevos que están emigrando hoy, víctimas de la violencia? –se le preguntó en conferencia de prensa.

–México tiene hoy instancias específicas para atender las solicitudes; México hace una valoración cuidadosa de cada una de ellas, y está atento a revisar en todos los casos los méritos de cada solicitud en lo individual para darle respuesta adecuada.

–A raíz de esta crisis, ¿hay una evaluación nueva del tema de los refugiados? Es decir, más allá de la política que México ha tenido siempre.

–No, se están revisando puntualmente caso por caso, y la valoración de México al día de hoy es una evaluación que se hace alrededor de la solicitud específica y no de un planteamiento genérico.

Aseguró además que en los albergues estadunidenses no hay menores no acompañados de origen mexicano.

Ninguno, enfatizó. En general, el fenómeno y el tratamiento jurídico del niño mexicano migrante a Estados Unidos es diferente del tratamiento jurídico y la estancia migratoria que se da a los centroamericanos; eso implica que en términos generales no son los niños mexicanos los que están siendo detenidos; ellos tienen un tratamiento jurídico distinto, y una coordinación diferente con las instancias consulares mexicanas.