Escuelas, hospitales y hasta el parlamento de Westminster han sido afectados
Es una locura que el gobierno haya aumentado la edad de servicio a 60 años, queja de bomberos
Viernes 11 de julio de 2014, p. 32
Londres, 10 de julio.
Alrededor de un millón de trabajadores de la educación, el transporte y de los servicios públicos semiparalizaron este jueves las actividades en Gran Bretaña en protesta por los recortes gubernamentales a sus sectores y en lo que se considera la peor huelga en tres años, desde la asunción en 2010 del gobierno conservador de David Cameron.
Escuelas, hospitales y hasta el parlamento de Westminster han sido afectados por el paro de labores, además de que sindicatos convocaron a unas 50 marchas en Inglaterra y Gales. En la movilización participan profesores, empleados administrativos, barrenderos, choferes y hasta vigilantes de parques.
Los trabajadores se quejan de un congelamiento en los salarios desde 2012, un incremento del desempleo en el sector público, recorte de empleos y aumento en la edad de retiro. En el caso de los funcionarios, el gobierno congeló sus salarios durante dos años y luego ha restringido los aumentos a uno por ciento anual.
La secretaria general del Congreso de Sindicatos, Frances O’Grady, señaló que lo que están diciendo los trabajadores es que no pueden ser marginados de la recuperación y que a todos corresponde una parte justa a medida que la economía crece de nuevo
.
El líder del Sindicato de Bomberos, Paul Embery, afirmó que es una locura
que el gobierno haya aumentado la edad de servicio a 60 años, cuando muchos de los brigadistas son abuelos y abuelas
.
El primer ministro David Cameron anunció la víspera que en el próximo manifiesto del Partido Conservador introducirá candados contra los paros de labores, y aseveró que los huelguistas harían mejor en ir a trabajar
, ya que la medida de fuerza era la decisión de una minoría.
Medios de prensa destacaron que el servicio nacional de salud del Reino Unido enfrenta serios problemas financieros que pudieran desembocar en una crisis antes de las elecciones generales del próximo año. En un informe sobre el tema se sugiere la posibilidad de suspender la gratuidad de algunos servicios durante 10 años.
En paralelo, el gobierno británico anunció este día el inicio de una investigación sobre la muerte de decenas de pacientes en un hospital de Hampshire, en el sur del país, entre los años de 1988 y 2000.
La cadena de radio y televisión BBC citó un informe divulgado en 2013, después de más de una década de indagaciones, en el que se revela que los fallecimientos pudieron ser causados por el suministro a los pacientes, en su mayoría ancianos, de altas cantidades de drogas, como calmantes.