Jerusalén, 3 de julio.

El ejército israelí comenzó hoy el despliegue de tropas hacia la frontera con la franja costera de Gaza, donde un bombardeo sobre 15 presuntos blancos de grupos armados palestinos provocó heridas a 11 personas.

La movilización de un número indeterminado de tanques, transportes militares diversos y reservistas –según la descripción oficial de las fuerzas armadas de Israel– ocurrió mientras en Jerusalén Oriental continuaron por segundo día consecutivo los choques entre la policía local y palestinos indignados por el secuestro y asesinato de un joven palestino de 16 años, Mohammed Abu Jdeir, el miércoles pasado.

Israel no realizaba un desplazamiento masivo de tropas hacia los límites con el territorio palestino de Gaza desde 2012, como tampoco se habían registrado incidentes de gravedad en la región oriental de Jerusalén desde hace varios años, posiblemente desde la Intifada (levantamiento) de 1987 y 2000.

El miércoles estallaron las protestas en Shuafat, un barrio residencial de Jerusalén Oriental, ocupada y anexionada ilegalmente por el Estado israelí en tiempos recientes.

La violencia resurgió la noche de este jueves, cuando jóvenes palestinos atacaron con piedras a agentes policiales, que respondieron con balas de goma, bombas de humo y armas de fuego. Un total de 232 palestinos resultaron heridos en los enfrentamientos, según la Media Luna Roja. Seis de ellos tenían heridas de bala, de acuerdo con la misma fuente.

La muerte de Jdeir es aparentemente una reacción de radicales israelíes en venganza por el secuestro y asesinato de tres jóvenes israelíes, en Sderot por militantes del movimiento radical islámico Hamas en el distrito de Hebrón, en el territorio palestino de Cisjordania, que está totalmente bajo control de las fuerzas armadas de Tel Aviv.

De acuerdo con el ejército israelí, desde el miércoles en la noche miembros de Hamas dispararon 34 proyectiles hacia el sur de Israel, causando daños materiales a tres casas en Sderot y heridas leves a un soldado.

La movilización de tropas hacia la frontera con Gaza, los bombardeos y el arresto de unos 640 palestinos –entre ellos 11 ex diputados– ha sido la respuesta del ejército israelí a la muerte de los tres jóvenes israelíes.