Jueves 3 de julio de 2014, p. 5
Salvador. Consumadas las eliminaciones en octavos de final de México y Estados Unidos, los gigantes de la Concacaf, la sorprendente Costa Rica ya está en los cuartos de final de la Copa donde se medirá contra la Holanda, pese a que todos la daban como víctima segura del grupo de la muerte (con Italia, Inglaterra y Uruguay). Ahora cobijados con el manto del regalo del club Santos, cancha donde se entrenan, al recibir de regalo un uniforme de ese equipo donde militó Pelé, ha crecido su orgullo y hambre de seguir adelante. Por lo pronto, el portero Keylor Navas, aunque padece una dolencia en el hombro, estará en el vital encuentro del fin de semana.