El sacerdote Alejandro Solalinde señaló que es una tristeza y una pena que el gobierno mexicano no quiera cambiar y que en la detención del doctor José Manuel Mireles Valverde se haya valido de prácticas corruptas, viejas y mañosas como la siembra de armas y de mariguana para inculparlo.

Senadores del PAN y el PRD pidieron al gobierno federal un juicio justo para el ex vocero de los grupos de autodefensa de Michoacán, quien fue aprehendido el pasado fin de semana acusado de portación ilegal de armas y posesión de droga.

El senador panista Ernesto Ruffo sostuvo que está en duda la legitimidad de esas detenciones (la de Mireles y un grupo de autodefensas). Se dice que traían armas; obvio, lo hemos estado viendo desde hace muchísimo tiempo, pero lo que debe aclararse es el asunto de la droga, ya que esto demerita la posición del señor Mireles, por lo que urge se aclare.

Solalinde acudió ayer a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), junto con la Comisión Mesoamericana de Juristas, para solicitar que se pronuncie sobre la constitucionalidad de la detención de indocumentados centroamericanos en estaciones migratorias y en puntos de revisión en el interior del país.

Ahí, el sacerdote salió en defensa de Mireles, quien es una persona muy querida, muy respetada, que se sabe no es violenta y que, personalmente, nunca ha tenido armas largas.

También cuestionó las declaraciones del comisionado para la seguridad en Michoacán, Alfredo Castillo, quien afirmó que la detención del ex vocero de las autodefensas se debió a que desafió al Estado al andar armado, cuando se había comprometido a desarmarse desde mayo pasado.

El sacerdote acusó al gobierno de solapar la corrupción y la impunidad, al actuar en contra de los que no se callan, como fue el caso de Mireles: Y con esto, ¿quién sigue, sigo yo o quién, porque no nos vamos a callar?

En el Senado, el panista Ruffo Appel señaló que primero a Mireles lo respaldó el gobierno, lo dejó portar armas y ahora lo encarcela, por ello es necesario que haya transparencia, porque va de por medio la legitimidad del proceso que se le ha fincado y que aplica la autoridad. He escuchado que se duda del proceder del gobierno, dijo.