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La Jornada en Brasil 2014
Cosas del futbol

Café belga

E

pico partido brindaron Bélgica y Estados Unidos en Salvador de Bahía. Los vecinos del norte resistieron durante 90 minutos el acoso belga que disparó cualquier cantidad de obuses sobre su rival. Ya en el alargue suplementario los estadunidenses se disfrazaron de alemanes y de milagro se salvaron los europeos, que ya no podían con las botas.

En dos días vimos dos partidos dignos de un Mundial de futbol: el lunes Alemania-Argelia y ayer el ya citado. Futbol jugado a un ritmo vertiginoso y poco especulativo. Futbol en estado puro.

Se agradeció el espectáculo porque dos horas antes argentinos y suizos aburrieron hasta la desesperación. Ganó Argentina porque tiene el inmenso privilegio de contar con Lionel Messi, un jugador de otra galaxia que, reventado como estaba, sacó fuerzas para sortear rivales y dar un balón de oro a su socio Di María, otro zurdo pura sangre.

Pero los conosureños no acaban de dar con la tecla del buen juego. En lo individual sus jugadores son de un altísimo nivel, la mayoría juega en buenos y competitivos equipos europeos, pero cuando se enfundan la albiceleste parecen olvidar lo que saben.

A veces da la impresión de que la messidependencia castra el juego colectivo, algo que ya sucede con el Barcelona. El rosarino ejerce un poder magnético sobre sus compañeros que, cada vez que tienen la bola, alzan la mirada para ver dónde está el jefe.

No hay vacuna contra esa adicción al rosarino, y se entiende porque es uno de los pocos jugadores en el mundo capaz de ganar un partido solito. El otro es Cristiano Ronaldo, sin olvidar a la gran revelación del Brasil 2014, el colombiano James Rodríguez, a quien todavía le hace falta más recorrido para saber si tiene la consistencia de sus dos colegas.

Arriba de ellos, todavía, permanecen las figuras vivientes de Pelé y Maradona, genuinas referencias de la esencia futbolera. Y hablando de ellos, sería de agradecer que el astro argentino invitara al brasileño a participar en el programa que lleva en Telesur, De Zurda, para así zanjar amistosa y elegantemente su añejo desencuentro.

Vienen dos días de tregua mundialista, 48 horas para reponer fuerzas. Pero ya va apareciendo el futbol. Eso es lo que importa.

Twitter:@josetxoZ