El recorte sorpresivo a la tasa de referencia anunciado por el Banco de México (BdeM) el 6 de junio pasado significaría que el crecimiento de la economía estaría por debajo de 2.3 por ciento, cifra prevista por el gobierno federal, informó este martes el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

Las bases con las cuales el banco central asumió esa decisión se interpretan como el reconocimiento de dicho organismo que el rango de expansión de 2.3 y 3.3 por ciento ya no es correcto y que tiene elementos de análisis que han cambiado su visión sobre el crecimiento a la baja, explicó el vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del IMEF, Jonathan Heat, en conferncia de prensa.

El anuncio, abundó, fue sorpresivo porque se pensó que el principal factor que llevaría al BdeM a recortar la tasa de referencia sería la evidencia de un crecimiento considerablemente más lento, sobre todo en el segundo semestre. Incluso, ponderó que la decisión habría respondido a un ambiente político por los señalamientos sobre un estancamiento de la economía.

Sin embargo, el IMEF consideró que es limitado el estímulo a la actividad económica mediante la reducción de las tasas de interés, debido a rigideces del mercado y a que su impacto en la economía real es visible después de seis meses.

Heat afirmó que con los resultados de diversos renglones de la actividad económica al cierre de mayo, el IMEF revisó a la baja su pronóstico de crecimiento de la economía de 3 a 2.6 por ciento y estimó una menor generación de empleos.

Una tasa de crecimiento para 2014 de 2.6 por ciento pudiese ser factible siempre y cuando se cumpla una serie de factores que superen los riesgos a la baja, dijo.

Entre los nueve factores enumerados por el instituto, el directivo destacó un control de la inflación, estabilidad cambiaria y tasas de interés congruentes con ello, así como superar la baja confianza del consumidor y productor.

Además, que continúe el buen desempeño de la economía de Estados Unidos y un proceso ordenado de normalización de la política monetaria por la Reserva Federal, agregó Heat.

El directivo del IMEF indicó la economía mexicana requiere de un segundo semestre del año con una evolución económica mucho más firme, vigorosa y dinámica para poder alcanzar un crecimiento de 2.6 por ciento.

Heat no descartó, incluso, que el IMEF haga una revisión a la baja en la tasa de crecimiento de la economía nacional.

Al reducir sus pronósticos, el organismo calculó 544 mil 500 nuevas plazas de trabajo en el Instituto Mexicano del Seguro Social durante este año, cuando en mayo ese pronóstico era de 575 mil.