Bogotá, 15 de junio.

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, quien logró su relección este domingo con 50.94 por ciento de los votos en la segunda vuelta electoral, se comprometió esta tarde ante cientos de seguidores a buscar una paz sin impunidad y con sentido social. Definió su triunfo frente al candidiato uribista Óscar Iván Zuluaga, quien obtuvo 45.01 puntos, como la victoria de la paz, y agregó: “es el fin de 50 años de violencia en el país.

Esta no será una paz con impunidad, esta será una paz justa. Tendremos que dar pasos difíciles para asegurar que no sólo sea justa sino duradera, señaló el mandatario al referirse a diálogos que su gobierno lleva a cabo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desde noviembre de 2012 en Cuba, y que se propone ahora impulsar con el Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Tras apuntar que de esta manera recogía uno de los reclamos de su adversario Zuluaga, fuerte crítico de las negociaciones con la insurgencia, Santos subrayó que “el mensaje de hoy es también para las FARC y para el ELN, la segunda guerrilla del país. Paz, paz, Colombia quiere paz, gritaban los seguidores agitando banderas colombianas y palomas blancas de cartón.

Asumirá segundo mandato en agosto

La Registraduría Nacional del Estado Civil, encargada de organizar las elecciones, informó que Santos obtuvo 7 millones 804 mil 129 votos, mientras Zuluaga se adjudicó 6 millones 900 mil 512 votos. Las boletas en blanco sumaron 619 mil 194, para un 4.04 por ciento. Fueron convocados 32 millones 975 mil 159 ciudadanos. Así, el presidente revirtió el revés sufrido en la primera ronda del 25 de mayo, cuando perdió con 25.69 de los votos contra 29.25 de Zuluaga.

Santos, quien gobierna desde 2010 con una coalición de centro-derecha y obtuvo en esta elección el respaldo de la izquierda, se impuso al derechista para el cuatrienio 2014-2018 tras el escrutinio de 99.92 por ciento de los votos. Ganó con 50.94 por ciento de los sufragios, mientras Zuluaga consiguió 45.01 por ciento. La abstención fue superior a 53 por ciento, de más de 32 millones de votantes.

En este contexto, Santos agradeció a a la izquierda y a otras fuerzas que se sumaron en su apoyo, aun con las diferencias y escepticismo que se movilizaron alrededor de una causa, que es la de la paz. Dijo que sabían que la historia tiene su momento, el momento de la paz y el de terminar con este largo y cruento conflicto, de responderle a todas las víctimas y reconstruir...

Entre los agradecimientos mencionó a Clara López, de Polo Democrático, al restituido alcalde bogotano Gustavo Petro, a la Unión Patriótica, a Antanas Mockus, a todas las fuerzas y dirigentes de izquierda y progresistas, a los partidos de su coalición de Unidad Nacional, al partido de la U, al Partido Liberal, Cambio Radical, al ex presidente Belisario Betancourt del Partido Conservador, al tambien ex gobernante César Gaviria y muchos otros que lo apoyaron.

El relecto presidente Santos, que asumirá el segundo mandato en agosto, aseguró que no le fallará a Colombia en el compromiso de la paz y las reformas que habrá que hacer, en los planes sociales y corregir lo que haya que corregir. Al insistir en la paz, citó al papa Francisco que recientemente dijo que para conseguir la paz se necesita valor, mucho más que para hacer la guerra. Abogó por desterrar el odio.

El gobernante logró imponerse en Bogotá y en las regiones de la costa del Caribe, mientras Zuluaga consiguió apoyo en la zona central del país. Incluso, tuvo palabras para la selección que participa en el Mundial de Futbol, al apuntar que el sábado ganó con contundencia y mostró de qué estamos hechos los colombianos.

Con este resultado, Santos obtiene una victoria con un margen no tan estrecho que le va a permitir gobernar cómodamente. De todas formas, el partido Centro Democrático, de Zuluaga, va a ejercer una oposición muy temperamental, pero con sólo 32 representantes de un total de 268 congresistas, dijo Fernando Giraldo, experto en Sistemas Políticos de la Universidad Javeriana.

Poco después de consolidarse oficialmente la relección del presidente, su adversario Óscar Iván Zuluaga reconoció su derrota. Quiero felicitar al presidente Santos, la democracia consiste en esto, declaró el dirigente de derecha al hablar ante simpatizantes. Perdimos con altura, con entereza, añadió, pero criticó el aparato estatal en favor del oficialismo.

No más FARC, no más FARC, gritaban los militantes en referencia a uno de los ejes de la campaña de Zuluaga. Me siento muy orgulloso de haber sido el candidato del uribismo, señaló el delfín del ex mandatario Álvaro Uribe. La ex candidata presidencial del Partido Conservador, Marta Lucía Ramírez, que se unió a la campaña de Zuluaga luego de la primera vuelta, lo escoltó en su discurso.

Mientras el jefe de Estado reafirmó su campaña electoral para esta jornada en pedir el voto a los colombianos con el argumento de que de resultar relegido sellará definitivamente la paz con las guerrillas, Zuluaga en contraposición sostuvo que sólo seguiría adelante con el proceso de paz con las FARC si éstas detienen sus actividades militares y con una serie más de condiciones.

Zuluaga era el candidato impulsado por el ex presidente Álvaro Uribe (2002-2010), enemigo acérrimo de las guerrillas y partidario de la vía militar para combatir a los grupos insurgentes. Con su triunfo en la primera vuelta por casi 460 mil votos, Zuluaga, ex ministro de Hacienda, de 55 años, confiaba en que refrendaría la victoria con su discurso de no a la impunidad de los líderes rebeldes.

Ahora los analistas han colocado a Santos, economista, de 62 años, como un astuto jugador de póquer que apostó su relección a una sola carta: el proceso de paz con la guerrilla. Y ganó. La sede de campaña de Santos en Bogotá empezó a celebrar los resultados, cuando se comenzaron a conocer los primeros recuentos.

Tras adelantar el proceso de paz con las FARC desde finales de 2012 en Cuba con miras a poner fin a 50 años de confrontaciones entre las partes, el martes pasado se conoció que el gobierno y el ELN iniciaron también una fase exploratoria para un eventual proceso de paz.

Santos fue ministro de Defensa del polémico ex presidente Uribe, ahora senador electo, y de su mano alcanzó la jefatura del país en 2010. Meses después las relaciones entre ambos se rompieron y, a la fecha, ambos mantienen duros enfrentamientos, especialmente por el proceso de paz. También ex ministro de Hacienda, Santos sostiene que de alcanzar la paz el PIB llegará al menos a 7.5 por ciento.

En mensajes por separado, los presidentes ecuatoriano, Rafael Correa; venezolano, Nicolás Maduro; boliviano, Evo Morales, y el salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, felicitaron a Santos y su pueblo. Correa le reiteró su apoyo al proceso de paz.