Sociedad y Justicia
Ver día anteriorMiércoles 4 de junio de 2014Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Escuela deberá designar a una maestra para que la auxilie y acompañe

Por primera vez concede juzgado amparo a una menor víctima de bullying

Dado que la SEP fue omisa sus padres optaron por recurrir a esa protección jurídica

 
Periódico La Jornada
Miércoles 4 de junio de 2014, p. 37

Por primera vez desde que en abril de 2013 entraron en vigor nuevos alcances jurídicos de la Ley de Amparo, un juez federal en esa materia concedió la protección de la justicia federal a favor de una menor de edad que en meses recientes ha sido víctima de acoso escolar, conocido como bullying.

El juzgado octavo de distrito en materia administrativa concedió este martes el amparo a una menor, cuyo nombre se mantiene bajo reserva para proteger su identidad, para el efecto de que la escuela designe a una maestra que la auxilie, acompañe y proteja en todo momento, a fin de evitar que continúen las molestias hacia su persona.

A partir de las recientes reformas a la Ley de Amparo se ampliaron las posibilidades para que los gobernados puedan solicitar la protección de la justicia federal en caso de omisiones de autoridades.

De esta forma, cuando una instancia gubernamental sea omisa en atender un requerimiento hecho por escrito por un gobernado, si este último solicita el amparo, un juez puede concederlo para el efecto de que la autoridad dé cumplimiento a la petición.

En el caso de la menor víctima de bullying, su representante legal contratado por sus padres y/o tutores, solicitó en diversas ocasiones a la Secretaría de Educación Pública (SEP) que pusiera remedio inmediato al acoso escolar que ha sufrido la menor.

Sin embargo, la dependencia fue omisa a este planteamiento por escrito, por lo que los padres de la menor optaron por recurrir al amparo.

La resolución del juzgado octavo de distrito en materia administrativa, que es inédita en el Poder Judicial Federal, también implica que la menor sea escuchada por las autoridades del instituto escolar en el que cursa los estudios de primaria a fin de que manifieste si se encuentra conforme con los alcances y resultados del amparo.

Para sustentar su sentencia, el juzgado de amparo citó el articulo cuarto de la Constitución mexicana y diversos preceptos contenidos en tratados internacionales que dan protección al sano desarrollo psicológico y físico de los menores de edad.