Con la finalidad de concientizar a jóvenes y padres de familia sobre la importancia de brindar a los niños educación, respeto y la oportunidad de desarrollarse en una sociedad solidaria, de igualdad y de amor, el monólogo Los niños perdidos se ha mantenido en el escenario durante 12 años y 600 representaciones en varios países de América y diversas ciudades del país.

El montaje, basado en el cuento A los pinches chamacos, de Francisco Hinojosa, es un reflejo de la violencia infantil en los entornos social y familiar, la cual se ha incrementado en una sociedad donde se pretende educar a los niños con cuerazos, bofetadas y puntapiés.

Para conmemorar el aniversario, este sábado fue develada la placa de las 600 representaciones en el teatro La Capilla –donde continuará su temporada hasta el 28 de junio– en una ceremonia a la que asistieron como padrinos Francisco Hinojosa y su hija Jimena; Rafael Barajas, El Fisgón, monero de La Jornada; el director de escena, Antonio Crestani; Óscar Armando García, coordinador del Colegio de Teatro de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México, y el actor Dagoberto Gama.

Dirigido y actuado por Esteban Castellanos, el monólogo –que presenta la compañía El Fénix Producciones– cuenta los problemas familiares y sociales que sufren las niñas y niños de las grandes ciudades, como violencia, abuso y delincuencia juvenil.

Un niño, que en su hogar ha crecido con los gritos: ¡deja ahí, pinche chamaco!; ¡qué haces, pinche chamaco¡ es el encargado de mostrar este mundo de violencia y desintegración social que aqueja al país. Una noche, el protagonista, de entre nueve y 12 años, y sus amigos Rodrigo y Mariana, deciden escapar de los azotes que sufren en sus hogares e inician una aventura que los convierte en niños de la calle.

En México y el mundo hay muchos pinches chamacos que piden atención, pues su entorno es cada vez más agresivo, y lo que comienza como un juego inocente como matar moscas, al final los convierte en criminales.

La pérdida de valores afectivos, el maltrato y la indiferencia son algunos aspectos que refleja el actor Esteban Castellanos, quien con gran destreza interpreta a más de 20 personajes en el escenario.

Después de la develación de la placa, Hinojosa, quien ha tenido la oportunidad de ver el monólogo en diversos escenario, incluso en Lima y Colombia, señaló que Los niños perdidos ha crecido con el paso del tiempo. Después de 12 años ya me acostumbre a verla en un teatro y confirmar que la historia sí puede tener un sentido.

El Fisgón fue breve en su intervención: Este pinche chamaco, es un gran actor, mientras Antonio Crestani, elogió el trabajo de Castellanos por el ejercicio de perfección técnica que realiza al interpretar a diferentes personajes de manera limpia y fresca.

El actor Dagoberto Gama, quien participó en la galardonada película El violín, comentó que antes las obras infantiles jugaban con la realidad de los pequeños, pero en la actualidad han evolucionado las temáticas del teatro infantil con propuestas como las de Castellanos.

Los niños perdidos, con Esteban Castellanos, se presenta los sábados a las 13 horas, en el teatro La Capilla (Madrid 13, Colonia Del Carmen, Coyoacán).