Acervo de mil 400 fotos, del considerado como destacado autor de imágenes de la Revolución
Primero se garantiza la permanencia de la pieza, después se documenta y por último se digitaliza
Aunque registró el maderismo, su labor fue apreciada igual por carrancistas que por villistas y zapatistas
Entre otros hallazgos, hay una imagen de una entrevista entre Zapata y el Dr. Atl, en 1914
Lunes 26 de mayo de 2014, p. 6
Alrededor de mil 400 fotografías del Fondo Aurelio Escobar Castellanos han recibido tratamientos de conservación luego de que el valioso acervo fuera donado, a principios de este año, a la Fototeca Nacional del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Se trata de un conjunto de imágenes que guarda sorpresas
, dado el carácter inédito de muchas de ellas, coincidieron Juan Carlos Valdez Marín, director de la fototeca, y Arturo Guevara Escobar, nieto del fotógrafo que en el pasado lustro ha comenzado a ser reconocido como importante autor de instantáneas de la Revolución.
Esta colección se considera una de las más completas, en términos visuales y técnicos, que le han sido donadas a esta instancia en los años recientes.
El acervo, en el aspecto técnico, tiene desde un ferrotipo –el cual se crea de un positivo directo sobre una hoja de metal– hasta negativos de diversos formatos e imágenes panorámicas de tamaño medio, en las cuales se especializó Aurelio Escobar (1888-1964).
El artista incursionó en diversos campos de la creación fotográfica, no sólo en el retrato de estudio, sino también en el registro de la vida cotidiana de la época. A la par, en 1912 tuvo la oportunidad de estudiar en la Southern School of Photography, en Tennessee, Estados Unidos, y eso le sirvió mucho a su formación como creador
, explicó Valdez Marín.
Incluso, agregó, varias imágenes del fondo son desconocidas por la naturaleza de su trabajo de estudio, pues el autor no se puede considerar como un fotógrafo de prensa. La mayor parte de su labor está ligada al estudio de su sobrino Heliodoro Juan Gutiérrez Escobar (10 años mayor que él), que tuvo sus orígenes como casa amplificadora de retratos.
Memoria gráfica del maderismo
Si Heliodoro J. Gutiérrez tuvo la oportunidad de hacer retratos a Porfirio Díaz, Aurelio Escobar se relacionó con la élite maderista durante la toma de Ciudad Juárez, cuando él se encontraba en el lugar para una convención de fotógrafos que había organizado The Eastman School of Professional Photography, entre el 9 y el 11 de mayo de 1911.
Aurelio Escobar generó una memoria gráfica del maderismo, hasta el asesinato del presidente. Después viajó a Estados Unidos vino unos días antes de la Decena Trágica y regresó al país del norte. Su retorno a México se dio a la caída del régimen de Victoriano Huerta. A partir de ahí su labor sería apreciada lo mismo por carrancistas que por villistas y zapatistas.
Escobar trabajó el tema revolucionario desde una perspectiva y características diferentes, según su nieto Arturo GuevaraFoto proporcionada por la Fototeca del INAH
Debido a sus tablas, manifestó Arturo Guevara, Aurelio Escobar trabajó el tema revolucionario desde una perspectiva y características diferentes. En muchas de sus obras se puede observar que son encargos, no retratos posados solamente; tienen una función específica, con un perfil que podríamos llamar propagandístico, de posicionamiento de imagen
.
Por ejemplo, dijo, el famoso retrato de Zapata con traje de charro se tomó en el estudio H. J. Gutiérrez, y fue Aurelio Escobar quien llevó al jefe revolucionario; se dice que por ese cuadro el general pagó mil pesos plata
.
Entre otros hallazgos del acervo fotográfico también se encuentra una imagen de 1914, que corresponde a una entrevista que sostuvieron Zapata y Gerardo Murillo, Dr. Atl, quien –a solicitud de Carranza– le pedía a don Emiliano sumarse a la Soberana Convención Revolucionaria.
Panorámicas y comerciales
La calidad de las imágenes destaca desde las más tempranas, realizadas en las primeras décadas del siglo XX, hasta la que data de mediados de la misma centuria. Lo mismo se halla un retrato de novia de estilo pictorialista virado al sepia, que fotografía comercial y panorámicas de grupos sindicales, o un álbum de vistas de Río de Jainero, Brasil, de tono verde azulado que data de los años 50 a 60 del siglo pasado.
Juan Carlos Valdez Marín refirió que por regla en la Fototeca Nacional primero se conservan las fotografías, luego se catalogan y finalmente se digitalizan. Ese proceso respalda la preservación y difusión del acervo en cuestión.
Primero se realiza una conservación preventiva que garantice la permanencia de la pieza a través del tiempo, después se documenta para conocer qué, quién o dónde es el hecho que está registrado en la placa y, por último, la digitalización permite un acceso más rápido y eficiente a través de nuestro catálogo en línea
.
En los próximos meses, el equipo del Departamento de Conservación de la Fototeca Nacional concluirá el ciento por ciento del Fondo Aurelio Escobar Castellanos; hasta ahora ha avanzado en 80 por ciento y después será catalogado y digitalizado para que los interesados descubran la mirada de un fotógrafo que ha ido ocupando el lugar de uno de los hacedores de la memoria gráfica de México.