Un palacete de la época porfiriana, catalogado como de valor artístico y arquitectónico, ubicado en Paseo de Reforma 297, comenzó a ser demolido para construir una torre de 58 pisos que albergará 361 departamentos, lo que terminará por saturar los servicios urbanos en la zona.

Vecinos de la colonia Cuauhtémoc denunciaron lo anterior en conferencia de prensa, y señalaron que en este caso, al igual que ha ocurrido con otros rascacielos que se desarrollan a lo largo de esta avenida, las constructoras utilizan los huecos legales para destruir el patrimonio histórico de esta parte emblemática de la ciudad de México.

Vamos a hacer uso de todo los recursos legales para frenar esta obra, pero queremos advertir a las autoridades que el enojo y el rechazo de la comunidad existe, por lo que también nos movilizaremos, señalaron los representantes vecinales.

El inmueble, construido en 1938 por el arquitecto Rafael Goyeneche, comenzó a ser demolido en la primera semana de mayo, refirieron, tras señalar que con ello las autoridades continúan permitiendo que desaparezcan las escasas construcciones de valor histórico que existen.

El dictamen aprobado por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) precisa que la torre contará con ocho sótanos, planta baja y 57 pisos, con una altura de 197.50 metros, pero que se deberá preservar el inmueble catalogado, lo que en los hechos no está sucediendo, pues ya se destruyó la fachada y parte de la techumbre.

Aunado a ello, Ramón Ibarra, presidente de la Asociación de Residentes de la colonia Cuauhtémoc, explicó que se autorizó un certificado único de uso del suelo para Paseo de la Reforma 297, fusionando los predios 38 y 40 de la calle Río Papaloapan, para construir el edificio, aun cuando en las calles internas la altura máxima permitida es de seis pisos.

Rogelio García Mora, vecino, indicó que con ésta suman ocho torres que están en construcción –más dos que ya fueron edificadas– sobre Paseo de la Reforma, que atraerán cerca de 40 mil personas que saturarán aún más esta zona.

Magda Hofmann, coordinadora interna del comité ciudadano de la colonia, indicó que como vecinos y contribuyentes aspiran a tener voz y voto en estos proyectos. No estamos en contra del progreso ni de las inversiones públicas y privadas, siempre y cuando se respeten las normas y se incluya la opinión de la comunidad, apuntó.

El representante legal de los vecinos, Raúl Espíndola, adelantó que interpondrán un juicio de amparo ante un juzgado federal para frenar las obras.

Otros casos similares son la torre Reforma, ubicada en Reforma y Río Lerma, donde se demolió una casa de tipo barroco-gótico-plateresco, y la torre Mapfre, en Paseo de la Reforma y Río Rhin, que afectó una construcción de 1929.