En una emboscada cuatro militares fueron asesinados y dos resultaron heridos cuando una treintena de sicarios le cerró el paso a un camión que transportaba soldados del 32 batallón de infantería del Ejército Mexicano con sede en Ameca, Jalisco. El ataque ocurrió la tarde del lunes sobre la carretera de ingreso al municipio de Guachinango, 130 kilómetros al poniente de Guadalajara, en la región Sierra Occidental. La emboscada se dio cuando el camión militar pasaba junto a un monumento y una camioneta se le cerró, lo que propició un choque y de inmediato ataque con granadas y disparos. En el país se cometieron otros diez asesinatos en Chihuahua, Sonora, Guanajuato y Sinaloa. En Coahuila la policía del estado, el Ejército Mexicano y la Secretaría de Marina reforzaron la vigilancia en las carreteras y caminos que comunican a esa entidad con Nuevo León y Tamaulipas, para evitar que delincuentes en fuga por las medidas de combate a la violencia en Tamaulipas se puedan refugiar en ciudades como Saltillo, Monclova y Piedras Negras. El gobernador, Rubén Moreira Valdez, dijo que se desplegaron escuadrones del Grupo de Armas y Tácticas Especiales de la Comisión Estatal de Seguridad en los municipios de Guerrero e Hidalgo, que se localizan sobre la carretera Piedras Negras-Nuevo Laredo; y que la Marina incrementó el patrullaje en las regiones sureste, centro y la zona carbonífera del estado.