Vandana Shiva en México
andana Shiva vino a México en abril, invitada por Cinema Planeta, Festival Internacional de Cine y Medio Ambiente de México. No es la primera vez que esta doctora en Física viene a México. En mayo de 2013, convocada por el Tribunal Permanente de los Pueblos, dio una importante conferencia en la Universidad Nacional Autónoma de México.
Esta vez, además de dar entrevistas y conferencias, se sumó como testigo de honor a la demanda que presentaron organizaciones como Semillas de Vida, científicos y otras personalidades ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, por contaminación ilegal con maíz transgénico en Oaxaca y el DF.
Vandana Shiva conoce bien las estrategias que han utilizado empresas como Monsanto, para controlar semillas en sus centros de origen y diversidad como el algodón y la berenjena en India, o ahora el maíz en México. Lo que buscan es patentar las semillas robándose el conocimiento milenario de generaciones de agricultores, por el solo hecho de introducir un gen en el material genético de las plantas. Pretenden crear monopolios, cobrar patentes y vender agroquímicos violando las culturas milenarias y los ecosistemas.
Para ello, compran o se asocian con empresas, corrompen gobiernos y cabildean leyes como la de semillas, que en México obliga a usar semillas certificadas (Silvia Ribeiro, La Jornada, 27/08/07), atentando contra la libertad, la democracia y la autonomía. En el caso de los transgénicos, se pone en riesgo también la biodiversidad y la salud de los campesinos y consumidores.
Otra de sus estrategias es señalar como inferiores las semillas de nuestros países e imponer la idea de que las suyas son superiores, cuando ocurre justamente lo contrario. En realidad sus semillas contaminan, pero además ya están contaminadas porque les introducen material tóxico mediante una tecnología inexacta y obsoleta que no deja ningún beneficio. Hasta ahora no hay mayor rendimiento, propician el surgimiento de plagas y malezas cada vez más resistentes
Vandana Shiva considera que si el gobierno mexicano permite la siembra de maíz transgénico, podría ocurrir lo mismo que pasó en India: la destrucción de la forma de vida de miles de agricultores tradicionales, lo que los llevaría a la miseria y tal vez al suicidio.
Ella ve sólo un camino: luchar unidos por la libertad y la diversidad por encima de los límites geográficos. En sus palabras: agricultura local, solidaridad global. En India no se ha permitido ningún alimento transgénico gracias a los movimientos sociales. Aquí la unión de tod@s contra el maíz transgénico tendrá los mismos resultados.