La Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados solicitó a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) realice una investigación especial del gasto de fondos federales en los estados, debido a que en 2013 los recursos destinados a cubrir las necesidades de estados, municipios, el Distrito Federal y sus 16 delegaciones fueron superiores en 85 mil 709 millones de pesos a lo autorizado por el Poder Legislativo.

Mientras el Congreso autorizó un gasto federalizado de un billón 389 mil 428 mil 100 millones de pesos, el gobierno federal destinó un billón 474 mil 137 mil 400 millones de pesos, lo que incrementó 10 por ciento los recursos en ese año respecto de 2012.

Asimismo, la comisión explicó que las transferencias del ramo 33, Aportaciones a estados y municipios, en 2013 fueron superiores en 13 mil 254.4 millones de pesos (2.58 por ciento) a lo aprobado por el Congreso de la Unión.

La petición es resultado de un primer estudio de esa comisión a la cuenta pública del primer año de gobierno de Enrique Peña Nieto, debido a que es precisamente en el gasto federalizado en el que existen mayor número de denuncias de hechos, por lo que se busca reducir el desvío de recursos por parte de los gobernadores.

En el reporte, el presidente de la comisión, José Luis Muñoz Soria (PRD), refirió que este sobrejercicio debe ser explicado, porque, si bien el incremento es mínimo en términos porcentuales e incluso se podría argumentar que sólo se trata de un ajuste en términos de la inflación, la recaudación tributaria de los estados es casi nula y la dependencia de las entidades de las transferencias federales es cada día más preocupante.

Refirió que ya durante el Informe de resultados de la cuenta pública 2012, la del último año del sexenio de Felipe Calderón, la ASF hizo observaciones importantes sobre el ejercicio de los fondos federales por incumplimiento de obligaciones fiscales, pagos no autorizados e improcedentes, gastos no objeto de los fondos y pagos de comisionados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).

Estas son razones de peso que deberán ser consideradas en la revisión de la cuenta pública (2013) tanto por la ASF como por los órganos de fiscalización superior locales, a fin de consolidar el esquema de gasto federalizado, haciéndolo más eficiente, eficaz, transparente y funcional.

Los fondos federales, amplió, no pueden ser solamente una gran oportunidad de desvío de recursos por parte de los gobiernos estatales y municipales.

Según el estudio de la comisión –debido a que ni la Secretaría de Hacienda ni la mesa directiva de la Cámara de Diputados han publicado el informe completo–, el incremento a las aportaciones del ramo 33 representó un aumento de 5.3 por ciento, equivalente a 26 mil 642 millones de pesos, respecto de lo autorizado para 2012.

En un comparativo de las aportaciones federales del ramo 33 durante 2013, respecto del año previo, la comisión explicó que ascendieron a 527 mil 157 millones de pesos, y que los principales incrementos fueron para el estado de México (8 por ciento adicional), Puebla, Jalisco y Guanajuato (con 7 por ciento cada uno), Chiapas, Aguascalientes y Baja California Sur (6 por ciento adicional).

El estado de México recibió más de 10 por ciento del ramo 33, al obtener 57 mil 607 millones de pesos.