La capital del país subsiste al día en lo referente al suministro de agua. Tenemos agua para hoy, pero para mañana ya no; no hay más abastecimiento, no hay más agua, afirmó Eugenio Gómez Reyes, investigador del departamento de Ingeniería de procesos hidráulicos de la unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM-I).

Para ahorrar líquido y disponer de reservas hay que recurrir a medidas como captar agua de lluvia, tratar aguas residuales y fomentar el uso de dispositivos economizadores, pero no resultan eficaces los aumentos a las tarifas del consumo doméstico, pues quienes tienen recursos la seguirán pagando sin problema en lugar de ahorrar.

Si bien en las 16 delegaciones prácticamente ya no hay crecimiento de población, el desarrollo económico requiere de agua, por lo que es preocupante que no existan reservas del líquido.

En el foro Sustentabilidad y gestión del agua en la ciudad de México, organizado por la Comisión de Desarrollo Social de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, el especialista indicó que para enfrentar el problema se requiere ahorrar agua y hacer un mejor uso de la que se dispone, además de encontrar nuevas fuentes de abastecimiento, que no consistan en seguir extrayéndola del subsuelo, pues esto produce agrietamientos y rupturas del sistema hidráulico.

Otra opción de abastecimiento es la recuperación de volúmenes perdidos por fugas, que en la ciudad de México alcanzan una magnitud importante; otra fuente es aprovechar el agua de lluvia, así como tratar la que se tira al drenaje, a fin de poder usarla de nuevo.

Proyecto Tláhuac-Xico

Gómez Reyes mencionó que en la UAM-Iztapalapa tenemos un ciento por ciento de captación de agua; toda el agua de lluvia la captamos y la retenemos en aljibes y cisternas.

En cuanto al aumento de las tarifas del agua como medida para promover el ahorro, afirmó que la experiencia demuestra que no se logra así ese objetivo, ya que solamente incrementa la recaudación; empero, el uso de aditamentos ahorradores sí ayuda a reducir el consumo.

Miguel Ángel Gómez, también investigador de la UAM-I, resaltó la importancia de los proyectos de rescate del lago Tláhuac-Xico y de la cosecha de agua de lluvia. Dijo que esa institución educativa es víctima de la escasez, pero se abastece mediante pipas.

Rodrigo Gutiérrez, investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México, señaló a su vez que todas las autoridades están obligadas a respetar, proteger y garantizar el acceso al agua como derecho humano. Debe tratarse como bien social y cultural y no como bien económico; es decir, no debe ser considerado un negocio, agregó.