Peña acecha al DF
Alista cambios en el PRI-DF
Castigo a capitalinos
ara darnos una idea de todo lo que podría hacer el PRI con tal de ganar la jefatura de Gobierno de esta ciudad, estamos en condiciones de adelantarle que Enrique Peña Nieto se quedará sin el jefe de la Oficina de la Presidencia, Aurelio Nuño Mayer, quien, según gente de Los Pinos, podría llegar muy pronto a cubrir algo así como un interinato en la presidencia del PRI-DF.
Pero eso sólo por un momento. Los planes, según nos explican, son llevarlo (a Nuño Mayer) formalmente a la presidencia de ese partido en la ciudad, y mientras más pronto, mejor, porque el proyecto de asalto al DF ya está planeado y estructurado. Además de que, eventualmente, el mismo Aurelio Nuño, quien aún no llega a los 40 años, sería el candidato priísta a la jefatura de Gobierno de la ciudad de México, claro, dependiendo de los resultado de las elecciones de 2015.
El proyecto, o el asalto, como algunos lo llaman, se sustenta en lo que dentro del PRI suponen que serán dos pilares que apoyarían el éxito: uno es Roberto Campa, político de larga trayectoria en la ciudad que ya fue presidente de esa organización política en el DF. Campa, pese a su transcurrir por varias responsabilidades que podrían haberlo apartado de la cotidianidad política de la ciudad, vive pendiente de los asuntos importantes del DF, lo que le ha resultado no nada más en el conocimiento del DF y sus entrañas, sino en el respeto que le brindan en los ámbitos de su quehacer.
El otro nombre que, se supone, será un apoyo para el diseño de la ruta Nuño es la actual secretaria de Desarrollo Social del gobierno de Peña: Rosario Robles, quien a partir de sus dichos y hechos ha ido ganando franca animadversión por la gente de la ciudad de México. Su desempeño en el PRD y su cercanía con Peña, además de su debilidad frente a delincuentes como Carlos Ahumada, destruyeron la imagen que de ella se habían formado los ciudadanos de la capital, que la tuvieron como una de sus políticas preferidas y que ahora repudian.
Por tanto, si así tuviéramos que verlo, el proyecto priísta se vería cojo si esas son las dos patas en las que andaría. Pero además, todo indica que no habría tiempo suficiente para restaurar el daño que le han hecho no las porquerías de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, sino los gobiernos de ese partido, en particular el de Peña, que sigue sin poder resolver con certeza, desde su llegada a la Presidencia, el problema económico que vive México y el sufrimiento general que significa la violencia. Así que no todo el desprestigio es por Gutiérrez de la Torre.
Por eso decimos que tiempo le hará falta al PRI para tratar de cambiar un destino que ellos mismos se forjaron en el DF, y que no parece tener remedio. Así que muy pronto tendremos noticias del PRI, que ya no aguantaba a Gutiérrez, al que está despachando como acostumbra ahora.
De pasadita
Cuentan que el sujeto llegó a la mesa donde estaba la mujer, la miró y encaró: Diputada, a ver si ya aprueban la descentralización. No haga caso de los que están en contra. Yo necesito tener el control del líquido, si no las cosas no van a ir bien
. La diputada contestó como política: Lo estamos estudiando
. Y recibió algo así como una orden: Pero que sea rápido
. La conversación quedó allí.
La amenaza fue de Ramón Aguirre, titular del Sistema de Aguas de la ciudad de México. Dicen que el asunto ya se cocinó y que la privatización del agua será el castigo que se quiere imponer a la ciudadanía por su falta de cuidado del líquido. Aunque si lo que necesitamos es un cristal bien transparente para diagnosticar lo que pasa con el agua en el DF, lo primero que tendríamos que analizar es la incapacidad del mismo Ramón Aguirre, quien durante dos sexenios lo único que se le ha ocurrido es privatizar el servicio vía la descentralización de la dependencia que dirige. ¡Qué cosa!