Como hace 54 años, habitantes recrean la hazaña zacapoaxtla del 5 de mayo de 1862
Hubo saldo blanco, pese a la gran cantidad de participantes y espectadores
Martes 6 de mayo de 2014, p. 31
Con salvas de paz, indígenas zacapoaxtlas, soldados mexicanos y fuerzas invasoras volvieron a enfrentarse
como en 1862, pero ahora en los pueblos de San Juan de Aragón y el Peñón de los Baños, donde se recreó la Batalla del 5 de Mayo en Puebla.
Al filo de las 11 horas se inició en el jardín Revolución, de la delegación Gustavo A. Madero, la tradicional ceremonia cívica y el reconocimiento a los héroes nacionales de aquella fecha histórica, que fue ejemplo de fortaleza y valentía de un pueblo.
Bajo la presidencia de Benito Juárez, se pudo derrotar la arrogancia del que era considerado el ejército más poderoso del mundo y pretendía socavar la dignidad de los mexicanos: el francés
, señalaron autoridades delegacionales, quienes depositaron una ofrenda floral en el busto erigido al general Ignacio Zaragoza.
Después, los indígenas zacapoaxtlas y otros más con el uniforme militar de los franceses dispararon cientos de salvas con sus fusiles, los estruendos simulados de escopetas y cañonazos y el olor a pólvora envolvió el ambiente, no sólo en el pueblo de San Juan de Aragón, sino también en el Peñón de los Baños.
Ahí, más de 10 mil almas, bajo el mando del general Zaragoza, se batieron como hace 154 años para evitar que el ejército francés se apoderara del país, en una larga lucha admirada por cientos de vecinos y paseantes, quienes con gritos les expresaban su apoyo.
La 84 representación de la batalla en la delegación Venustiano Carranza se llevó a cabo en 2.5 kilómetros, donde fueron enormes las bajas de las fuerzas extranjeras ante nuestros hermanos, los zacapoaxtlas
, daban a conocer los organizadores, quienes, pese a la gran cantidad de gente que participó en esta fiesta popular, lograron tener saldo blanco.
La representación en San Juan de Aragón continuará este martes con el regreso al jardín Revolución, para la escenificación de la firma de los Tratados de la Soledad y el retiro de las tropas invasoras.
Ambos eventos fueron resguardados por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, quienes realizaron cortes a la circulación y vigilaron que no se rompiera la ley seca, que se mantendrá hasta este día 6, aunque algunos lograron burlarla y refrescarse con “una rica chela o gomichela”, camuflada en vasos de tiendas de conveniencia.
No te dejan de otra, pero nos estamos cuidando
, comentaron jóvenes, quienes siguieron atentos al desarrollo de la Batalla de Puebla, cuya historia, la neta, no conocíamos bien, pero está interesante, porque demuestra que somos un pueblo bien chingón
.