A partir de ahora todas las obras que realice el Gobierno del Distrito Federal contarán con un aula para que los trabajadores que no saben leer o escribir puedan aprender, o los que no han concluido la primaria o secundaria lo puedan terminar, anunció el mandatario capitalino Miguel Ángel Mancera Espinosa, al convocar a los integrantes de los sectores de la construcción e inmobiliario a sumarse a este programa de alfabetización.

Tengamos un espacio, vamos a impactar cuando menos entre 10 y 20 por ciento de esa población. Que los números finales dirán que no todos son del Distrito Federal, no importa, de lo que se trata es acercar la educación a donde está la fuente de trabajo, planteó.

Al celebrar el día de la Santa Cruz en un inmueble para oficinas que se edifica en la colonia Polanco, con inversión de 700 millones de pesos, aclaró que este era un festejo diferente porque además de la taquiza, del convivio, se entregaron reconocimientos a 11 albañiles que participaron en el proyecto de enseñanza que realiza la asociación civil Construyendo y Creciendo.

De esta manera, dijo, se edifica una plataforma educativa, se alfabetiza y se da educación a la gente que más lo necesita, que más lo requiere.

Antes, María de los Ángeles Ávalos, madre de seis pequeños, quien habló a nombre de los trabajadores graduados, comparó: Cuando uno no sabe leer es como si estuviera ciego, pasa por todos lados y no sabe lo que dicen los letreros; por eso me llena de alegría ya saber leer y escribir.

Al tomar como base la experiencia de la asociación civil, Mancera Espinosa explicó que levantar un aula en las obras no requiere de una inversión onerosa; se habla de alrededor de 12 mil pesos para el salario de los maestros y recursos para la adquisición de computadoras, mobiliario y material didáctico.

Afirmó que este programa de alfabetización cuenta con el aval de la Secretaría de Educación Pública (SEP) federal y el apoyo de estudiantes de la UNAM.

Al mismo tiempo que edificamos una ciudad, que se vuelve cada vez más moderna, se construye una sociedad más educada, resumió.

Al término, el mandatario capitalino conversó algunos minutos con los trabajadores, mientras comía un taco de carnitas y tomaba una cerveza oscura.