Sábado 3 de mayo de 2014, p. 23
Washington. El presidente estadunidense, Barack Obama, declaró ayer que la fallida ejecución con inyección letal que hizo agonizar durante más de media hora al reo Clayton Lockett en Oklahoma fue un hecho profundamente perturbador
. Obama opinó que algunos crímenes son tan odiosos que sus autores podrían merecer la pena capital, pero advirtió que el incidente y la agonía de Lockett despertaron interrogantes significativas sobre cómo se aplica la pena capital
.