En la novela de Guillermo Ferrara (Bahía Blanca, Argentina, 1967), El secreto de Eva, se entretejen física cuántica, genética secreta, geometría sagrada, sexo alquímico y arqueología cósmica para narrar una historia de suspenso, en la que se expone el enorme poder del ADN femenino, al tiempo que se revela una conspiración de la industria musical estadunidense y británica, mediante ciertas vibraciones sonoras, para manipular el cerebro humano, explica el autor a La Jornada.

Publicado por Suma de Letras, ese volumen es la segunda parte de una saga que se inició con El secreto de Adán, novela que gira en torno a los cambios geomagnéticos del sol, una conspiración sobre ciertas formas de control del ser humano y sobre cómo ascender de nivel respecto del estado de conciencia, abunda Ferrara.

Ambas novelas tienen que ver con la arqueología antigua, con las pirámides, monumentos y grabados en piedra, que según las investigaciones e interpretaciones del autor, parecen haber sido realizadas por otros seres con más poder y más evolucionados.

A partir de ello se desprenden muchos enigmas e intrigas, respecto de temas como la física cuántica, la sexualidad alquímica y la conspiración de la música, explica el escritor argentino y maestro de yoga, tantra y holística.

Rebeldes contra el patriarcado

El secreto de Eva también tiene que ver con la revalorización femenina de la divinidad, tanto la que se encuentra en el hombre como en la mujer. Aquí las protagonistas son valientes, investigadoras y rebeldes de un sistema patriarcal obsoleto.

Evangelina Calvet es una escritora que desafía a la sociedad secreta La Hermandad de la Serpiente, cuyos integrantes preparan un ritual ancestral y sexual para controlar a los dormidos.

Ella roba ciertos documentos, por lo que será amenazada, pero con la ayuda de Adán Roussos (protagonista de la primera novela), irán revelando al lector las intenciones oscuras de tal hermandad secreta, que si el lector tiene curiosidad e investiga un poco, se la va a encontrar en la vida real, señala el autor.

En la novela se describe cómo una cantante famosa es obligada a realizar ciertos rituales; ahí entra la genética secreta, detalla.

Otro aspecto, concluye, es que también se expone, conforme transcurre la historia, cómo manejar y desarrollar nuestra sexualidad de una manera más creativa y radiante.

En El secreto de Eva, según el autor, 80 por ciento es realidad y se puede comprobar; el resto de la historia es inventada.