Vence ultimátum lanzado por Kiev, pero el ejército no interviene
Martes 15 de abril de 2014, p. 21
Moscú, 14 de abril.
Vencido el plazo del ultimátum lanzado por el gobierno de Kiev a los hombres armados que retienen edificios gubernamentales y estaciones policiales en varias ciudades del este de Ucrania, nada pasó este lunes y el ejército ucranio se mantuvo en estado de alerta, en espera de nuevas órdenes.
Los políticos pro occidentales que gobiernan en Ucrania desde la destitución del presidente Viktor Yanukovich, refugiado en Rusia, no quieren emprender una operación militar que pudiera servir de motivo para una invasión de las tropas rusas en las regiones orientales colindantes, donde continúan concentrados cerca de 40 mil soldados.
Tampoco quieren que la inestabilidad se mantenga indefinidamente. Aleksandr Turchinov, presidente en funciones de Ucrania, adelantó hoy dos líneas de acción que piensa seguir antes de comenzar las negociaciones en Ginebra, el jueves de esta semana, si es que éstas finalmente se llevan a cabo con la participación de Rusia.
Por un lado, entiende que anoche el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), convocado de urgencia por Moscú, respaldó el derecho de Ucrania a defender su integridad territorial, pero –a juzgar por lo dicho por Turchinov a Ban Ki-moon en la conversación telefónica que mantuvieron hoy– pretende involucrar a los cascos azules de la ONU en una operación conjunta contra los separatistas
, lo que se antoja poco más que inviable sin el visto bueno de Rusia.
Y por el otro, trata de mostrar que no se opone a una eventual conversión de Ucrania en federación, aunque con sus reglas y tiempos, para lo cual no excluye celebrar un eventual referendo de toda Ucrania, el mismo 25 de mayo, fecha de las elecciones presidenciales, en que se podría preguntar a los votantes si respaldan la idea de que su país es un Estado unitario e indivisible
.
Participar en ese referendo, para los rusohablantes, sería reconocer la legitimidad de quien resulte electo presidente, y no hacerlo, dar la razón a los pro occidentales de que no procede instaurar una federación.
El gobierno de Kiev quiere llevar a la reunión de Ginebra evidencias de que Rusia está involucrada en la toma de sedes administrativas y policiales en el este de Ucrania. El Consejo Nacional de Seguridad de Ucrania asegura tener más de una decena de agentes rusos detenidos y anticipa que pronto revelará los pormenores de cada caso.
El canciller ruso, Serguei Lavrov, reaccionó hoy con vehemencia: no nos metemos en los asuntos internos de Ucrania, eso contradice nuestros intereses; no tenemos ahí agentes del GRU (inteligencia militar) ni del FSB (seguridad interna). Nos han acusado de eso varias veces. Si tienen algún detenido, preséntenlo
.
Los ucranios sostienen que en su país actúa la unidad especial para acciones encubiertas
del GRU en el espacio post soviético y remiten a un reportaje de la televisión oficial rusa, emitido el 28 de abril del año pasado, en el cual por primera vez se revela su existencia.
La unidad se creó para desestabilizar cualquier país, con efectivos dispuestos a suplantar, sin identificarse y con armamento sofisticado, a inconformes locales, en aras de lograr cualquier objetivo político de la Federación Rusa
, afirma el reportero. Quien hable ruso puede ver el reportaje.
Y en respuesta a lo dicho por Lavrov, el servicio de seguridad de Ucrania (SBU) subió hoy a Internet las conversaciones telefónicas interceptadas entre quienes retienen la delegación policial en Slaviansk y sus superiores, presumiblemente del GRU desde territorio ruso. También en ruso, el siguiente enlace.
El gobierno de Rusia no se da por enterado y continúa su habitual línea de desprestigiar a los políticos pro occidentales que gobiernan en Kiev: no está de más recordar que a la violencia en el Maidán (Plaza de la Independencia, epicentro de la protesta contra Yanukovich), la cual provocó decenas de víctimas, la llamaban democracia, y las protestas pacíficas que ahora se llevan a cabo en el sur y el este de Ucrania son calificadas de terrorismo y se autoriza el uso del ejército en una operación antiterrorista. La hipocresía no tiene límites
.
Es lo que dijo hoy el jefe de la diplomacia rusa, Serguei Lavrov, antes de preguntar. Queremos saber qué fue a hacer el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), John Brennan, a Kiev
, pues trascendió que estuvo el pasado fin de semana en la capital de Ucrania y se entrevistó con el director del SBU, Valentin Nalivaichenko.
La respuesta sobra y confirma, una vez más, que Estados Unidos no es ajeno a lo que ocurre en Ucrania, igual que Rusia algo tiene que ver con lo que pasa en el sur y este de ese país.