Martes 15 de abril de 2014, p. 2
Sydney, 14 de abril.
La acidificación del océano, una de las consecuencias del cambio climático, reduce el instinto de supervivencia de los peces y los expone a sus depredadores, según un estudio publicado este lunes en la revista Nature Climate Change.
La investigación analizó el comportamiento de los peces en los arrecifes de coral situados frente a las costas de Papúa Nueva Guinea, una zona donde el océano Pacífico es naturalmente ácido, y descubrió que su comportamiento es más arriesgado.
Normalmente los peces evitan el olor de un depredador, es totalmente lógico. Pero en este caso se sienten atraídos por su olor, lo cual es increíble
, explicó uno de los autores del informe, el profesor Philip Munday de la universidad australiana James Cook.
Conducta arriesgada
También se alejan más de su refugio y son más activos, nadan más (...) Es una conducta más arriesgada para su supervivencia porque son más fácilmente detectables por un predador
, agregó el científico.
El nivel de acidificación en la zona en la que se centró el estudio, un laboratorio natural
perfecto, según Munday, es comparable al que tendrán los océanos de todo el planeta al final de este siglo si no se toman medidas para luchar contra el cambio climático.
Cerca de 30 por ciento del dióxido de carbono emitido hacia la atmósfera por la actividad humana termina siendo absorbido por los océanos, lo que provoca que estos sean más ácidos.
Según Munday, los peces de la zona estudiada no han podido adaptarse a la acidez, a pesar de haber vivido toda su vida expuestos a niveles elevados de dióxido de carbono.
La coautora del estudio, Jodie Rummer, dijo que mientras el incremento de dióxido de carbono en el agua afectaba a la conducta, no parecía afectar a sus aptitudes físicas.