El operativo en que fue abatido Enrique Kike Plancarte en el estado de Querétaro fue en seguimiento de las acciones concertadas de la Armada y del Ejército Mexicano en Michoacán, de marzo pasado, cuando elementos de fuerzas especiales de Infantería de Marina mataron a Nazario Moreno, El Chayo, en un enfrentamiento en el municipio de Tumbiscatío.

Fuentes navales confirmaron lo anterior y agregaron que las acciones conjuntas de militares y marinos en contra de Los caballeros templarios continúan en otras partes del país. ‘‘Cumplimos nuestro objetivo en Querétaro –en el municipio de Colón, donde fue ubicado Plancarte–, pero las acciones continúan contra los líderes de ese grupo delictivo’’.

Agregaron que fueron alrededor de 50 elementos de fuerzas especiales de la Armada los que participaron en la operación, muchos de los cuales tomaron parte en el enfrentamiento del 9 de marzo pasado en el que murió Nazario Moreno, quien junto con Plancarte era uno de los principales líderes de ese grupo delictivo; queda Servando Gómez, La Tuta, quien continúa prófugo de la justicia.

Los entrevistados destacaron el trabajo coordinado de inteligencia naval y militar en el seguimiento del ex líder templario y aseguraron que la coordinación operativa entre la Armada y el Ejército ‘‘va más allá de las palabras’’. Añaden: ‘‘Hemos demostrado con hechos que la colaboración de las fuerzas armadas se ha convertido en una realidad en la actual administración’’.

Como muestra de esto destacaron que, herido, Plancarte fue transportado en un helicóptero de la Armada a la 17 Zona Militar con sede en la ciudad de Querétaro. Dijeron también que el operativo en el municipio queretano de Colón, fue muy similar al que se implementó en Tumbiscatío, Michoacán.

Es decir, los elementos de fuerzas especiales de la Armada de México eran los encargados de conseguir la captura, mientras los integrantes del Ejército se hicieron cargo del perímetro de seguridad.