Los intentos por depurar el Instituto Nacional de Migración (INM) ya han demostrado su inutilidad, por lo que el gobierno federal debería mostrar una actitud valiente y desaparecerlo para poner en su lugar un organismo que aborde el tema desde una perspectiva de derechos humanos y no sólo como tema policiaco, afirmó el coordinador del programa de migración de la Universidad Iberoamericana, Javier Urbano.

El INM ya es un organismo podrido. Con una actitud valiente y seria, Enrique Peña Nieto debería desaparecerlo si quiere pasar a la historia como un presidente que vio la migración como algo positivo y no como amenaza, y quiso atenderla desde una perspectiva humana, enfatizó el académico luego del foro Ellos tienen la palabra. Un diálogo con los defensores de derechos humanos de los migrantes.

En este sentido, recalcó: Ya nos cansamos de escuchar sobre depuración, certificaciones y capacitaciones, porque las extorsiones y las denuncias son constantes. Esa narrativa ya se agotó. Ahora tenemos que pasar a medidas más radicales, como eliminar el INM y crear un órgano a nivel de ministerio con un perfil más humanista y no sólo de seguridad.

Para que México tenga autoridad moral al reclamar a Estados Unidos la forma en que trata a los indocumentados, dijo, las autoridades deberían abandonar su política de acoso a los migrantes de origen centroamericano en vez desaparecer el tema de su agenda y decir que las iniciativas legales resuelven todo de forma mágica.

Fray Tomás González, director del albergue para migrantes La 72, coincidió en que el asunto de la migración indocumentada no está entre las prioridades del actual gobierno. Incluso, estimó que en el primer año de gobierno de Peña Nieto hay un retroceso en este ámbito, comparado con el sexenio anterior.

Hay una involución, empezando con el nombramiento (de Ardelio Vargas) en la dirección del INM, pues es un enfoque de policías y de seguridad nacional. Además, ahora están aumentando las deportaciones de centroamericanos, como un espejo de lo que pasa en Estados Unidos. Migración habla del rescate de indocumentados, pero su forma de rescatarlos es metiéndolos a estaciones y deportándolos, lamentó.