Hermosillo, Son., 25 de marzo.

A casi un mes de que el Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Universidad de Sonora (STEUS) comenzó la huelga en esa casa de estudios, no ha habido una sola reunión con representantes de la rectoría, dio a conocer este martes el secretario del Trabajo estatal, Gildardo Monge Escárcega, quien consideró que no existe un ambiente propicio para dialogar.

La huelga del STEUS se inició el 28 de febrero por violaciones al contrato colectivo de trabajo, lo que dejó a más de 30 mil estudiantes sin clases.

Tenemos que construir un ambiente propicio para que puedan sentarse a la mesa a solucionar el problema. Ahora las condiciones no están dadas; hay que buscar un entorno tranquilo para que no fracasen las negociaciones, dijo Monge Escárcega.

Comentó que una de las principales demandas del STEUS es que en las mesas de negociación participe el rector, Heriberto Grijalva Monteverde, quien no ha hablado directamente con el sindicato ni con las autoridades laborales.

Quizás es una estrategia de la universidad. Entiendo que cuando se retrasa la negociación y no se ve una salida rápida (los sindicalizados) empiezan a pensar muchas cosas, ciertas o no, afirmó el funcionario estatal.

Indicó que se buscará que esta semana empiecen las negociaciones, con la mediación de la Secretaría del Trabajo.

Hemos tenido reuniones por separado, buscando crear el ambiente propicio para que se sienten a negociar; estamos muy prontos a instalar la mesa de diálogo. Ayer nos reunimos con el STEUS y con personal de la universidad, por separado, expuso Gildardo Monge.

Los trabajadores emplazaron a huelga en demanda de que se resarzan decenas de violaciones al contrato colectivo de trabajo relacionadas con pago de horas extras, aportaciones al fondo de retiro y descuentos injustificados.

Por su parte, Grijalva Monteverde aseguró que no existen tales violaciones y consideró injustificado el cierre de la institución. Yo estoy mortificado porque 30 mil estudiantes están sin recibir clases, pero también porque año con año la huelga se ve como una forma de lucha. En esto no estoy de acuerdo, señaló. Según el rector, hay otras formas de negociar sin afectar a los estudiantes.