Opinión
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Astillero

La bandera Colosio

Oficialismo soso

Cuento sobre Lomas Salinas

Zambrano, continuismo e PRD

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La secretaria general del CEN del PRI, Ivonne Ortega, y el ex candidato a la Presidencia Roberto Madrazo, ayer, durante la ceremonia por el 20 aniversario luctuoso de Luis Donaldo Colosio Murrieta, en el patio de la Universidad del Claustro de Sor Juana, en la ciudad de MéxicoFoto Cristina Rodríguez
E

l PRI y Los Pinos (se les menciona por separado, aunque sabido es que están más juntos que nunca, ahora con la sana cercanía que ha proclamado César Camacho) hicieron notables esfuerzos por mantener la redituabilidad política del caso Colosio en sus alforjas políticas. Enrique Peña Nieto tuiteó generalidades aplicables a éste y cualquier otro caso parecido (Sus ideales nos inspiran a seguir transformando México) e incluso había enviado unos días atrás un texto igualmente soso a un portal de Internet de creciente consulta diaria, sdpnoticias.com, dirigido por Federico Arreola (lo más notable fue la decisión política de Los Pinos de concurrir a las nuevas tecnologías informativas, en este caso al diario digital que había conseguido que otros políticos y personalidades relevantes contaran lo que esta- ban haciendo cuando se enteraron de la muerte del sonorense. El texto de EPN.

A diferencia de los esfuerzos escriturales presuntamente hechos por Peña Nieto en persona, y de los actos oficiales de homenaje a quien fue candidato presidencial priísta (en la Universidad del Claustro de Sor Juana exaltaron la memoria del difunto tanto el dirigente nacional, César Camacho, como el presidente de la Fundación Colosio, Adrián Gallardo), una corriente social pluripartidista e incluso ajena a los partidos se manifestó en diversos actos cívicos. En la presentación de un libro sobre su padre, Luis Donaldo Colosio Riojas hizo la noche del pasado jueves un serio llamado a la unidad nacional, convocando a desterrar rencores y divisiones. De hablar reflexivo, serio sin pretender solemnidad, sin estridencias ni concesión alguna a la demagogia, el joven Luis Donaldo propuso, con otras palabras, la apertura de un proceso de recomposición nacional, de una auténtica transición política que permita superar los múltiples y graves elementos de la actual tragedia nacional.

En Magdalena de Kino, la tierra natal de quien comenzó su carrera priísta co- mo diputado federal y delegado de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP, el sector popular del PRI), Luis Donaldo Colosio Riojas, junto a su hermana Mariana, encabezó un acto popular en recuerdo del asesinado. Ella dijo que ve un país que toma conciencia de que puede transformarse sin depender de la voluntad de un presidente de la República. También planteó que la muerte de su padre sirvió para enseñarnos a no quedarnos callados. Y al igual que su hermano, habló de formas de reconciliación con la vista puesta en el futuro, a dejar de darle vueltas a lo importante: es tiempo ya de dejar el pasado y transformar el futuro.

La expectativa de pactar formas eficaces de evitar que el país llegue a bordes indeseables se produjo el mismo día en que se conoció la muerte de Adolfo Suárez, el primer presidente de la España en vías de restitución democrática. Él fue parte del grupo de antihéroes que debieron intentar fórmulas de entendimiento nacional a pesar de los añejos y profundos agravios acumulados. Del entorno ruidosamente confrontado, cada bando con suficientes razones para pretender el doblegamiento del adversario, entre militantes apasionadamente decididos a continuar los enfrentamientos y cerradamente indispuestos a ceder o negociar con los rivales, surgió el modelo político que, con todas sus imperfecciones, permitió a España salir del pasmo, el atraso y el encono.

En otro tema, la continuidad de Jesús Zambrano en la presidencia nacional del PRD es un significativo revés para las intenciones de Carlos Navarrete de desmarcarse un poco de los Chuchos, aunque fuese para efectos electorales inmediatistas. El guanajuatense sostenía hasta hace pocos días que había logrado que la corriente a la que pertenece, Nueva Izquierda, aceptara que hubiera un dirigente interino, para contar con garantías de imparcialidad en el proceso interno en el que la continuidad chuchista parece garantizada y, además, para que no se diera el espectáculo poco defendible de un Chucho entregando el relevo a otro Chucho (la idea de poner a alguien ajeno tenía como antecedente lo hecho en Coahuila por Humberto Moreira, quien dejó el último tramo del gobierno norteño para venirse al PRI nacional pero, sobre todo, para que no fuera él quien entregara el mando a su hermano Rubén).

A Navarrete le pesa la etiqueta de Chucho. Y aunque él juega a acomodarse como el menos chucho de los Chuchos, la prórroga de la estancia de Zambrano en el timón del sol azteca coloca en su justa dimensión la palabrería de cambio que el guanajuatense viene desgranando a propósito del relevo perredista. En un descuido, los Chuchos mayores (Ortega y Zambrano) acaban negociando la cabeza de Navarrete, aunque éste asegura con toda solemnidad que bajo ninguna circunstancia declinará a su candidatura. Por otra parte, al sostener a Zambrano en el liderazgo del PRD, se manda el mensaje de que esa corriente hegemónica no permitirá cambios ni innovaciones, y que el sol azteca insiste en apretar el cerco en torno a sí mismo, atrapado en los intereses de sus dirigentes pactistas, aferrado a los controles tradicionales y ahora buscando poner a un dirigente acotado en la persona del citado Navarrete. Desde luego, los meses de más que Zambrano seguirá al frente de su partido es una excelente noticia para el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien tendrá al mismo aliado opositor en el tramo de la aprobación de las leyes secundarias en varios temas, sobre todo el energético.

Y, mientras la violencia habida en el estadio Jalisco en el contexto de un juego entre Atlas y Chivas reitera los graves riesgos que en esos partidos de futbol profesional significan las porras y barras de mal llamados aficionados, ¡hasta mañana, con un tecleador astillado que con inexplicable desparpajo se ha atrevido a difundir un cuentecillo sobre Lomas Salinas, los mentados hermanos Cargos y Baúl Limas y el restaurante D’Gortari y sus especialidades, Hamburto doble y McKill Donald, entre otras deplorables ocurrencias!

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