En Lampedusa rescatan embarcaciones con 690 indocumentados
En Grecia se hunde barcaza; siete muertos y dos desaparecidos
Miércoles 19 de marzo de 2014, p. 25
Madrid, 18 de marzo.
Cerca de 500 migrantes ingresaron este martes a España a través de la frontera de Marruecos con Melilla, ciudad del país ibérico en el norte de África, en la oleada más numerosa hasta ahora.
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, advirtió que hay miles
de personas en la frontera que están a la espera de poder cruzar a suelo europeo, donde aspiran a mejorar sus condiciones de vida después de una larga travesía por África.
La Guardia Civil española informó que 492 personas ingresaron a Melilla en medio de una densa niebla que obstaculizaba la visión a los agentes que vigilaban la frontera.
Los migrantes fueron trasladados de inmediato al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes de Melilla, que se encuentra al borde del colapso y con una población que rebasa su capacidad.
Tanto ONG como periodistas se mantienen vigilantes de la actuación de las autoridades españolas y de la Guardia Civil, sobre todo a raíz de lo ocurrido el 6 de febrero en una playa de Melilla, en la que murieron 15 migrantes cuando intentaban llegar a las costas españolas y un comando de la Guardia Civil les repelió con balas de goma y gases lacrimógenos.
Ceuta y Melilla –las dos ciudades españoles situadas en el norte de África– viven de forma cotidiana la entrada de migrantes.
La mayoría de los migrantes huyen de guerras, hambrunas crónicas o la miseria que padecen en los países de donde proceden como Togo, Ruanda, Somalia, Guinea, Camerún y Zimbabue, entre otros.
Mientras, en Italia, la marina rescató en las inmediaciones de la isla de Lampedusa seis embarcaciones que transportaban a 690 migrantes africanos, 652 hombres, 19 mujeres y 19 niños.
Tras ser detectados en el estrecho de Cicilia en barcos que se encontraban a la deriva y con problemas en el funcionamiento del motor, fueron trasladados al puerto italiano de Augusta.
En Grecia, en tanto, el fenómeno de la migración tuvo un final trágico con la muerte de siete personas y la desaparición de otras dos al hundirse una barcaza en la que intentaban alcanzar la isla griega de Lesbos, al parecer procedentes de Turquía. Se desconoce la nacionalidad de los fallecidos, si bien la policía sospecha de que proceden de Asia o África.