La carencia histórica de una cultura democrática, la falta de honestidad en el desempeño de los funcionarios y una monstruosa desigualdad social han sido factores que han impedido al país definir un proyecto, sostuvo Andrés Manuel López Obrador al presentar su libro Neoporfirismo: hoy como ayer.

El ex candidato presidencial definió su libro como un análisis histórico desde una perspectiva de utilidad política, en el cual hace un paralelismo entre el régimen de Porfirio Díaz y las administraciones recientes, en el cual destaca las semejanzas en procesos privatizadores con visos de corrupción, desde la venta de acciones de trenes en el porfiriato hasta la subasta reciente de bienes públicos como minas, bancos y ahora el petróleo.

Durante su intervención, la escritora Elena Poniatowska destacó el recorrido histórico que realizó López Obrador, porque es una forma de descubrir el pasado para no incurrir en los mismos errores. El desconocimiento de la historia de nuestros políticos ha permitido que cada sexenio el problema que nos aqueja sea el eterno retorno a nuestros errores.

Poniatowska destacó que López Obrador ha escrito este libro, desde su capacidad de indignación ante una situación compleja para el país y su eterna lucha en contra de la desigualdad social. López Obrador coincide con historiadores y filósofos en que la historia es fundamental para conocer nuestra situación presente y una forma de denunciar las fechorías de los políticos.

La escritora subrayó que la trayectoria de López Obrador y su interés por el pasado en México lo han hecho coincidir con historiadores como Daniel Cosío Villegas, que “ven con indignación cómo la fuerza del poder político ha logrado desplazar a nuestras instituciones a través de la corrupción. Nos gobierna una élite tramposa y manipuladora.

De las fechorías recientes la que más preocupa a Andrés Manuel López Obrador es la reforma energética, el robo de todos los tiempos y el más irresponsable acto de traición a la patria. El neoliberalismo no es más que neoporfirismo y su estrategia nulifica nuestro futuro, dijo Poniatowska.

A su vez, el historiador Lorenzo Meyer manifestó que el libro hace un recorrido interesante por los problemas que han aquejado al país desde Díaz hasta nuestros días. En sus comparaciones enfatizó en algunos problemas constantes, como la corrupción en el manejo de los recursos públicos, la extrema desigualdad social y la ausencia –en el porfiriato, como ahora– de un real proyecto de nación.

Meyer dijo que otra constante entre el pasado porfirista y la realidad actual es la adulteración del régimen electoral, el dedazo como forma de designación para la sucesiones en el poder, un centralismo como lógica para ejercer ese poder, una política donde la oposición está ausente, mientras se fortalecen a las oligarquías mediante relaciones no convencionales.

López Obrador lamentó la falta de cultura democrática que ha tenido el país en su historia, una carencia que ha empantanado al país desde entonces, con excepción del breve periodo de Francisco I. Madero. Sin democracia, México no va a tener salida y no es que la democracia vaya a traer el cuerno de la abundancia, pero ayuda al equilibrio social y sin duda no tendríamos esta monstruosa desigualdad.

Explicó que el libro fue escrito durante el año y medio reciente, periodo en el que también se involucró en la creación del Movimiento Regeneración Nacional y el recorrido del país en defensa del petróleo. Mencionó que el libro sale a la luz en momentos aciagos de la historia del país, en medio de una fuerte crisis económica y con las reformas privatizadoras en marcha.