El modelo de comunicación instrumentado en 2008, sustentado en el uso de los tiempos del Estado para difundir la propaganda electoral, si bien ha resultado exitoso en el balance general requiere replantearse para ajustar algunos aspectos que lo consoliden, consideró Lorenzo Córdova, consejero del Instituto Federal Electoral (IFE), para quien existen aspectos técnicos y operativos que requieren revisarse.

En días pasados, el IFE remitió un diagnóstico sobre el Sistema Integral de Administración de los Tiempos del Estado (Siate) al Congreso de la Unión, a fin de que sea un insumo en el procesamiento de las leyes secundarias en telecomunicaciones y en el ámbito electoral. En principio, se acordó incorporar las observaciones de los partidos; algunos cuestionaron su contenido, por ser obsequioso con la responsabilidad de las dos grandes televisoras en el cumplimiento pleno del modelo.

Aunque ha habido tropiezos y debates intensos sobre los alcances del modelo casi de patria o muerte, como el tema de los bloqueos locales en las emisoras de televisión, Córdova senaló que hasta ahora no se ha repensado el modelo racionalmente, sin que ello implique dar marcha atrás con su elemento central: el uso de los tiempos del estado en la difusión de la propaganda electoral.

El informe destaca que se monitorean alrededor de 65 por ciento de señales de radio y televisión, lo cual ha sido cuestionado por el PAN y el PRD, porque no da certeza de que se transmitan la totalidad de los promocionales. Sin embargo, dijo Córdova, alcanzar la totalidad de monitoreo implicaría mayor inversión a un sistema que de origen costó 50 millones de dólares y en 2014 requerirá iniciar su modernización.

Labor del INE

De hecho, el IFE ya trabaja en la elaboración de las bases para licitar el cambio parcial de los equipos que tiene previsto en 2014, si bien su conclusión será ya responsabilidad del Instituto Nacional Electoral (INE). “Si de la revisión del diagnóstico y la elaboración de las leyes secundarias se desprende que el INE estará obligado a monitorear un puñado de señales, pues será una obligación”.

Al justificar la operación actual del Siate, destacó que las denuncias por incumplimiento en las pautas es cada vez menor y en los últimos meses ha sido casi nulo, lo que implica que hay un elevado cumplimiento en la transmisión de los espots.

Hay otros aspectos asociados al modelo que el Congreso deberá abordar, entre ellos reglamentar sobre el artículo 134 constitucional que regula la publicidad oficial. El caso reciente de la propaganda del gobernador de Chiapas (Manuel Velasco) más que un asunto que debería revisar la autoridad electoral, es un tema de rendición de cuentas competencia de otra autoridad.¿El órgano electoral debe ser el único responsable de regular la propaganda gubernamental? Me parece que no, apuntó Córdova.

Otro aspecto que se tornará complejo son las reformas que favorecen el must carry, must offer (que incorpora la transmisión de las señales abiertas en la televisión restringida. La razón: por un lado la ley obliga a que la programación sea transmitida en forma íntegra como se genera en la emisora original, pero por otro, la ley electoral impide difundir la propaganda oficial cuando haya procesos locales”.