El presidente Enrique Peña Nieto debe tener conciencia de la correlación de fuerzas en el Congreso federal, donde todo se tiene que discutir y dialogar para evitar la visión de agandalle que se imponía con la exhibición de una mayoría de votos, sostuvo el presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, José González Morfín.

En entrevista con La Jornada, el legislador panista recordó que en el Congreso se han dado debates, pero no ha existido posibilidad de incidir en cambios fundamentales a las propuestas enviadas por el Ejecutivo federal. Creo que eso lo entiende el Presidente; se entendió en los gobiernos del PAN y creo que se entiende ahora con el regreso del PRI. Y creo que más les vale porque finalmente la colaboración entre poderes es indispensable para avanzar, de lo contrario no habría forma de hacerlo.

El político michoacano expuso que en el actual periodo de sesiones, y en lo que resta del segundo año de la 62 Legislatura que a él le toca conducir, se perfilan jornadas difíciles por los temas que deberán resolverse y se encuentran en la cartera legislativa: reformas secundarias en materia de telecomunicaciones, competencia económica, energía y la político-electoral.

Aceptó que algunos de esos temas se tendrán que resolver en periodos extraordinarios, no tiene remedio –dijo–, pero se cumplirá con el compromiso.

En los próximos días el pleno camaral abordará la reforma a las leyes secundarias en materia de competencia económica, de telecomunicaciones, de política-electoral y de energía, sucesivamente.

Sin que alguna de ellas sea sencilla, pues sí parece que la energética será sin duda la más complicada. Cada una tiene sus propios ingredientes, en todas participan grandes jugadores (empresarios); trae presiones a la mesa donde se discuten, pero tenemos que buscar que las leyes secundarias correspondan con lo aprobado en la Constitución.

González Morfín reconoció que la negociación y el debate que habrán de presentarse en el pleno serán difíciles y problemáticos. Al preguntarle sobre los grandes jugadores a los que se refiere e intervienen en la discusión y elaboración de las leyes secundarias, respondió:

Los que hemos estado en esto durante algún tiempo sabemos que el cabildeo y las presiones son una realidad, pero también sabemos y estamos conscientes de que hay que mediar con eso y que finalmente hay que sacar adelante el trabajo. En el ámbito del Congreso, y en específico de las comisiones, las presiones son más de los cabilderos profesionales que todos sabemos que existen.

Al preguntarle si no se han expresado dudas de legisladores para entrar en la discusión de las reformas secundarias, expuso que él no ha observado a nadie cuarteándose ni pensando dar marcha atrás en torno a las reformas. Recordó que el Pacto por México ayudó a la toma de acuerdos entre las fuerzas políticas con mayor número de representación, y ahora una vez que ese instrumento de negociación se fracturó, el Congreso ha tomado la primera mano, para incidir directamente en el contenido de las leyes y de los acuerdos.

Se comprometió a que en San Lázaro los debates y las posiciones transcurran de la mejor forma, se trata de mandar una idea de que llevemos las discusiones en un ambiente de respeto, pero que también haya tolerancia para escuchar a todo mundo. Creo que es fundamental que todos los legisladores, dependiendo del resultado de la votación, se sientan escuchados a la hora de la discusión.