Ante una comisión de la Organización de Naciones Unidas (ONU), funcionarios mexicanos expusieron la estrategia gubernamental de combate a las adicciones y el narcotráfico, cuyo enfoque, subrayaron, debe ser la prevención, así como reducir los efectos negativos para el tejido social.

De igual forma, es necesario privilegiar el tratamiento por encima de la criminalización y tratar las adicciones como tema de salud pública, agregaron.

La delegación mexicana es encabezada por la subprocuradora Jurídica y de Asuntos Internacionales, Mariana Benítez Tiburcio, quien subrayó la importancia de la corresponsabilidad internacional en el tema.

También integran la delegación el subsecretario de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Juan Manuel Gómez Robledo, y el subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación (SG), Roberto Campa Cifrián.

Es necesario integrar los esfuerzos para prevenir y reducir los efectos negativos, los costos para el tejido social, la salud pública, la justicia, el desarrollo de la sociedad y, en consecuencia, el estado de derecho y la vigencia de las instituciones democráticas, afirmó la subprocuradora, según un comunicado de prensa conjunto emitido por la Procuraduría General de la República, la SRE y la SG.

Entre otras medidas, sostuvo, el gobierno de México apoya: 1) impulsar estrategias de prevención integral activa, que busquen tanto la reducción del consumo como la prevención de daños para el tejido social y que sean compatibles con la procuración de justicia, 2) privilegiar el tratamiento por encima de la criminalización y 3) consolidar políticas orientadas a tratar el consumo de las drogas como asunto de salud pública.

Lo anterior fue expresado durante el 57 periodo de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de la ONU, denominado Examen de Alto Nivel, que se realiza en Viena, Austria.

La Comisión de Estupefacientes es el órgano de la ONU encargado de la formulación de políticas del sistema de fiscalización de estupefacientes. Está integrada por 53 países, entre ellos México.