Salen a la luz nexos con la empresa que hizo la Estela de Luz
Viernes 14 de marzo de 2014, p. 5
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) presentó a lo largo de siete años observaciones a contratos otorgados por Petróleos Mexicanos (Pemex) a la empresa Oceanografía, que ascienden a 18 mil 242 millones de pesos, pero que la paraestatal ignoró y continuó otorgándole obras.
Información obtenida por La Jornada revela que la más reciente información fue de 2012, y se refiere a dos contratos que le concedió Pemex Refinación por 229 millones de pesos para la construcción del muelle de operaciones portuarias en La Paz, Baja California Sur.
El muelle debió ser construido por III Servicios –la compañía desconcentrada de Pemex que también estuvo encargada de la construcción de la Estela de Luz–, y sin embargo lo subcontrató a la empresa de Amado Yáñez en una asociación denominada Blastinaval, formada junto con Proyectos y Medio Ambiente.
Los reportes de observaciones de la ASF señalan que en esta obra Pemex Refinación y III Servicios no cumplieron con las disposiciones normativas aplicables al presupuesto, ejecución y pago de la obra, lo que representa importantes retrasos.
En la construcción de la Estela de Luz, III Servicios también subcontrató a Gutsa, a pesar de que esta compañía había sido inhabilitada por la Secretaría de la Función Pública (SFP) debido a las fallas en la construcción en la Autopista del Sol. Inicialmente la Estela costaría 300 millones de pesos, pero el monto se elevó a mil 400 millones.
Entre las observaciones de la auditoría resaltan 13 contratos para el mantenimiento de pozos y plataformas marinas en Cantarell, porque la paraestatal en 2006, accedió a la solicitud de Oceanografía para modificar los requisitos de las bases de la licitación pública respectiva, referentes a las características técnicas de la velocidad de la embarcación que se requería para los trabajos.
También la auditoría encontró que en 2006 Pemex Exploración y Producción (PEP) la benefició a través de condonaciones por la inversión de Oceanografía en oleoductos, gasoductos, terminales, transporte y tanques de almacenamiento del activo integral Ku-Maloob-Zaap. Tales deducciones ascendieron a 137 millones 749 mil 600 pesos y 55 millones 399 mil dólares.
‘‘Los pagos se realizaron por medio del Fideicomiso Master Trust, el cual no cumplía con los requisitos para ser considerado dentro de los Proyectos de Inversión de Impacto Diferido en el Registro del Gasto (Pidiregas), por no encontrarse en condiciones de generar los ingresos que permitan cumplir con las obligaciones pactadas y los gastos asociados hasta no considerarse como una unidad productiva’’, según concluyó la ASF al revisar el contrato PEP-O-IE-331/04 Oceanografía SA de CV.
En otros dos contratos, por 5 mil 389 millones 242 mil 800 pesos, por trabajos en plataformas marinas con apoyo de una embarcación, relacionados con la construcción de obras complementarias en plataformas, servicios de montaje de equipo y estructuras en el Golfo de México, Pemex concedió nuevos beneficios a la empresa.
La auditoría 08-1-18ATL-02-0477 concluyó que Petróleos Mexicanos ‘‘otorgó dos convenios modificatorios por reprogramación de los trabajos, con el argumento de haberse presentado un caso fortuito y de fuerza mayor por malas condiciones meteorológicas que afectaron las instalaciones del astillero Talleres Navales del Golfo SA de CV’’. En realidad, describió el órgano fiscalizador, ‘‘el caso fortuito o de fuerza mayor’’ invocado por Oceanografía ‘‘se derivó del incumplimiento del astillero y de proveedores contratados’’ por la empresa.
Pemex Exploración y Producción, amplió, no penalizó a Oceanografía el incumplimiento del contrato, cuando ‘‘debió proceder a la rescisión administrativa y hacer efectiva la fianza de garantía de cumplimiento.
‘‘Aunque se reprogramó el comienzo de los trabajos, la entidad fiscalizada no celebró un nuevo convenio de ampliación de plazo; se considera que la contratista Oceanografía SA de CV incurrió en incumplimiento del contrato, ya que no inició los trabajos en la fecha estipulada’’. En este caso, el probable daño se estimó en 100 millones 837 mil pesos.
Asimismo, en otra auditoría, por contratos con montos de 71 millones 34 mil 300 pesos y 134 millones 206 mil 500 dólares, para la construcción de tres gasoductos de 20 pulgadas y uno de 36 pulgadas, respectivamente, la ASF detectó que la subsidiaria de Pemex no reveló ese financiamiento como deuda de largo plazo en los estados financieros de las fuentes de fondeo de Pidiregas.
‘‘Sin embargo, sí se reportaron como deuda para los mercados de valores de Estados Unidos y de México, en los estados financieros consolidados de Pemex. Los recursos se destinaron a proyectos que no se ajustaron a los lineamientos definidos de los Pidiregas, ni ejecutados como fueron autorizados’’.
Además, explicó la auditoría, PEP fraccionó el financiamiento en múltiples obras y contratos que se llevaron a cabo a partir de la Ley de Obras Públicas, en lugar de las leyes General de Deuda Pública y Federal de Presupuesto.
Ello, concluye, ‘‘generó un descontrol y los diversos contratos llegaron a ser costosos, ya que no existieron parámetros para medirlos y originó mayor uso de recursos obtenidos con financiamiento’’.