El Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM) ya aceptó modificar los estatutos del gremio y efectuar cambios al contrato colectivo de los empleados de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

Entre éstos destaca desaparecer el Fondo de Habitación para los Trabajadores del Sector Eléctrico, que era como el Infonavit del gremio, y realizar nuevos cambios al esquema de jubilaciones.

El sindicato, que preside Víctor Fuentes del Villar, también proyecta regular la cláusula 67, la cual se refiere a la prestación que tenían los electricistas de no pagar el servicio de energía de sus domicilios.

Se trata de cambios drásticos, mutilaciones, al contrato laboral, que acabarán con prestaciones históricas, y todo ello ya lo aceptó la dirigencia del SUTERM sin someterlo a consulta de los trabajadores, subrayó la Coordinación Nacional de Electricistas, disidente del gremio. Incluso se habla de un posible recorte de personal y de la apertura total para la entrada de trabajadores que traigan las compañías privadas, las cuales operarán libremente en la paraestatal, apuntó.

Sostuvo que los cambios se deben, sobre todo, a la reforma energética, ya que se quiere dejar a la CFE más privatizable, y el sindicato ya dobló las manos. Analiza, junto con funcionarios de la empresa, las modificaciones que se plantearán sobre la situación laboral de los electricistas. Incluso, anotó, varios dirigentes están pidiendo sus retiros.

Dicha coordinación, que dirige Jesús Navarrete, entregó documentación a este diario, en la cual se revela que existe la pretensión de modificar otra vez la cláusula 69 del contrato colectivo, la cual se refiere a las jubilaciones. Al respecto, cabe mencionar que en 2010 ésta fue cambiada para que los trabajadores de reciente ingreso se jubilaran sólo mediante el esquema de las Afore, sin ninguna responsabilidad de la CFE sobre las pensiones.

Ahora se quieren hacer nuevas reformas a dicha cláusula para ampliar los grupos de trabajadores que entrarían a ese esquema, como los que tienen 15 años de antigüedad o incluso para todos.

Una empresa más privatizable

El comité ejecutivo del sindicato está llevando a cabo, a espaldas de los trabajadores, sin consulta y negociando en lo oscuro, como siempre, pláticas con los directivos de la paraestal para ir quitando prestaciones, como el Fondo de Habitación. Ya desapareció el servicio médico privado. Ahora quieren dejar la empresa más privatizable.

Todos estos cambios se dan porque la reforma energética impone modificaciones al contrato colectivo. En primer término, porque el sindicato pasará de ser una organización de empresa a una de industria. Esa situación se aprovechará para quitar prestaciones y hacer perdedizos fondos mutualistas, enfatizó.

De hecho, ya hubo convenio para modificar las cláusulas de jubilación. La 67 se refiere a la prestación del servicio eléctrico para los trabajadores. Actualmente, éstos pueden disponer de 350 kilowatts-hora al mes sin pagar, y ahora se va a reglamentar, indicó la Coordinación Nacional de Electricistas.

Recalcó que el sindicato ya aceptó los cambios a los estatutos y se prevé que en junio próximo serán modificados.

Asimismo, el gremio está de acuerdo con que se realice un fuerte ajuste de personal, sobre todo de los llamados eventuales, quienes tienen contratos por dos o tres meses.

Jesús Navarrete indicó que los dirigentes del sector no han objetado nada de lo que que proyecta la CFE. Están cooperando ampliamente, a cambio de que tampoco les pidan cuentas. Según él, la reforma energética no sólo acabará con la soberanía en materia de petróleo y electricidad, sino va a significar el desmantelamiento de los contratos colectivos de la CFE y Petróleos Mexicanos, acabar con prestaciones y acondicionar la empresa para la privatización.

El SUTERM no se ha inconformado, pese a que se afectará la planta laboral de la comisión. Ningún dirigente ha querido moverse, porque tampoco quieren que el gobierno los moleste. Es un acuerdo implícito.

Ante la avalancha de empresas privadas, contratistas y subcontratistas que llegarán a la CFE, los trabajadores van a quedar sin materia de trabajo, sin defensa ni prestaciones. Algunos funcionarios están planteando jubilaciones, crear un fideicomiso como el que tienen los ferrocarrileros y de ahí pagarlas, es decir, a la larga extinguir esa prestación. El sindicato que dirige Víctor Fuentes del Villar, hasta la fecha, a todo ha dicho que sí a los directivos de la paraestatal.