Los Potros por fin ganan de locales; Gallos lucieron alicaídos
Lunes 10 de marzo de 2014, p. 5
Cancún, 9 de marzo.
Con cuatro goles del ecuatoriano Michael Arroyo, el Atlante se impuso 4-2 a un alicaído Querétaro, con lo que sigue luchando por su permanencia en la primera división, ya que se acercó a tres puntos del Atlas en la lucha por el no descenso, en el partido con el que concluyó la fecha 10 del Clausura 2014.
Los Potros consiguieron su primer triunfo en el estadio Andrés Quintana Roo y treparon al sexto sitio de la tabla general, en un mal debut del portero Luis Manuel García, quien cometió tres errores que abrieron el camino a Arroyo, que llegó a seis tantos y se ubicó a uno de los líderes Martín Bravo y Enner Remberto Valencia.
Los Gallos Blancos fueron un equipo desconcentrado, al parecer más preocupado por su situación extracancha. El técnico Ignacio Ambriz decidió dejar en la banca al arquero Édgar Hernández, quien había tenido algunas fallas, pero el novato García se mostró nervioso y cargó con la goleada.
Al minuto 16, García realizó una precipitada salida, lo que aprovechó Arroyo para sólo tocar el esférico ante la portería solitaria. Sin embargo, en la última jugada del primer tiempo, el guardameta salvó a su escuadra de la segunda anotación al desviar en un mano a mano con Ángel Sepúlveda.
Querétaro igualó 1-1 al 54, en tiro potente del brasileño William da Silva que dejó sin oportunidad a Éder Patiño.
Pero el gusto sólo les duró tres minutos, en un taconcito del chileno Roberto Gutiérrez a Arroyo, y éste fusiló al arquero para el 2-1.
El 3-1 llegó al 59, en otro taconcito de Gutiérrez al ecuatoriano, que esta vez mandó un tiro lejano y potente que dobló las manos al guardavallas visitante.
Arroyo logró su cuarto tanto en el 73 de acción, en un tiro libre por la izquierda que García quiso adivinar al dar un paso a la derecha y ya no pudo regresar a cuidar el palo que le correspondía.
A 10 minutos del final los queretanos trataron de regresar al encuentro con otro gol de Da Silva, quien le dio cifras definitivas al marcado con tiro potente dentro del área.
Arbitraje sin problemas de Fernando Guerrero.