Sakhir, Bahrein, 27 de febrero.

La segunda y última semana de entrenamiento hacia el campeonato de la Fórmula Uno, en el Circuito Internacional de Bahrein, comenzó con el mexicano Sergio Pérez a la cabeza de la tabla de tiempos, al sorprender con el Force India.

Checo registró 1.35.290 minutos con los neumático blandos, lo que hasta ahora es su mejor cronómetro en la pista. Sin embargo, la semana pasada su coequipero, el alemán Nico Rosberg, quien hoy fue cuarto, firmó un tiempo mejor por dos segundos.

Necesitábamos un buen día para iniciar esta semana, y hoy lo tuvimos. Rodamos muchas vueltas probando diferentes compuestos y mapas del motor. Ha sido una jornada fantástica en términos de aprendizaje sobre el coche, apuntó Pérez.

Mañana es mi último día en el monoplaza antes de que empiece la temporada, así que espero que podamos tener otro día sólido para estar en buena forma de cara al Gran Premio de Melbourne, mencionó el piloto mexicano, quien completó 91 vueltas al mando del VJM07, aventajando a otro piloto de la armada de Mercedes, el francés Valtteri Bottas, quien recorrió el circuito en 111 ocasiones.

Entre las sensaciones positivas para Checo destaca que ha podido centrarse en el programa de desarrollo del coche sin padecer problemas, ya que ha girado más de 100 vueltas al circuito cuando quedan dos semanas para el arranque del Campeonato Mundial.

Mercedes, como proveedor de motores, ha vuelto ha estar arriba, pues además del VJM07, el Williams del francés Bottas fue segundo, a poco menos de un segundo.

El tercer sitio fue para el finlandés Kimi Raikkonen con 1.36.184, de Ferrari, que regresó a Shakir con un nuevo alerón delantero, aunque no lo usó su piloto cuando hizo su mejor tiempo.

Rosberg se ha mantenido ocupado con las nuevas modificaciones, que aunque mínimas, se analizan en el monoplaza, entre ellas cambios en el difusor trasero, las tomas de aire y la tapa del motor.

Finalmente, Red Bull sigue sin dar solución a sus problemas, lo que es preocupante a estas alturas de la pretemporada. Hoy en los controles estuvo el australiano Daniel Ricciardo, quien sólo pudo dar 39 vueltas antes de sufrir un problema en el motor que le terminó la sesión desde medio día.